Investigadores de la Universidad de Cambridge recomendaron un nuevo tipo de tapabocas como el más seguro para prevenir un posible contagio de covid-19. Lo hicieron luego de observar cómo bajaron los contagios entre el personal de salud que trabaja en la primera línea de atención a pacientes infectados desde que empezaron a usar este nuevo barbijo.
Se trata de la mascarilla conocida como FFP3, que puede llegar a brindar un 100 por ciento de protección, según sostuvieron los investigadores de esa casa de estudio.
Luego de notar que la tasa de contagios entre los médicos que atendían a pacientes con covid seguía siendo alta pese a las medidas de protección, las autoridades de los Hospitales Universitarios de Cambridge (CUH) decidieron cambiar el equipo de protección respiratoria y pasar de las FRSM, los barbijos quirúrgicos resistentes a fluidos, a las máscaras FFP3.
La particularidad de estos últimos es que una vez colocados proporcionan un sello hermético alrededor de la nariz y la boca, para evitar que las infecciones transmitidas por el aire se inhalen y exhalen.
El cambio de barbijos repercutió en la cantidad de médicos contagiados. "Una vez que se introdujeron los cubrebocas FFP3, el número de casos atribuidos a la exposición en las salas de covid se redujo drásticamente", explicó Chris Illingworth de la Unidad de Bioestadística MRC de la Universidad de Cambridge.
“Basándonos en los datos recopilados durante la segunda ola de la pandemia, desarrollamos un modelo matemático para analizar los riesgos que enfrenta el personal que trata con pacientes con covid en el día a día. Esto nos mostró el enorme efecto que podría tener el uso de un mejor equipo de protección personal para reducir el riesgo para los trabajadores de la salud”, sostuvo Mark Ferris, del Servicio de Salud Ocupacional de la Universidad de Cambridge, uno de los autores del estudio.