“Hemos anunciado el paro para el 1 y 2 de julio con el tiempo suficiente como para que ellos hagan gestiones ante los grandes financiadores y de esta manera tener las herramientas para venir, sentarse en una paritaria y hacer una contrapropuesta. Sin embargo, ellos no ofrecen nada, paritaria cero" aseguró el secretario general de la Federación Argentina de Trabajadores de la Salud (Fatsa), Carlos West Ocampo ante la inminencia de la huelga convocada.
La medida de fuerza contempla paros de cuatro horas por turno en distintas clínicas y sanatorios privados, institutos de diagnóstico, geriátricos, psiquiátricos y sectores de emergencias médicas. Las negociaciones salariales se vienen desarrollando desde hace más de un mes pero sin que el gremio consiga que las organizaciones patronales les hagan una oferta salarial acorde a la actual situación económica.
En una entrevista con la señal IP, West Ocampo, explicó que luego de una larga negociación con las distintas Cámaras y una reunión en el Ministerio de Trabajo, no se llegó al “mínimo acuerdo” y por ello se convocó la medida de fuerza. Los gremios piden un 45 por ciento de aumento salarial para cubrir el desajuste inflacionario, mientras que las empresas “no ofrecen nada”.
El dirigente gremial recordó que "nuestro sector es el que mayuor contagios y muertos ha tenido. No estamos hablando de personas que puedan depender de caprichos. Es preciso que se den cuenta que el sistema de salud hay que financiarlo. La Bancaria firmó este procentaje más una gratificación de 100 mil pesos. El PAMI, que sus trabajadores hacen home office, le dio ese porcentaje más 20 mil pesos". Y añadió: “Entonces cómo nosotros no vamos a pretender que a nuestros compañeros, que son los héroes de la pandemia, no se les reconozca su trabajo y se les pague el salario necesario para cubrir el desfasaje por la inflación”.
Según West Ocampo, la contraparte sostiene que “no tuvieron aumentos de cápita ni de aranceles durante todo el año 2020” y que éstos permanecieron congelados mientras que “hubo un aumento de costos muy importante, no solo en los salarios del año pasado sino también en toda la inversión que hubo que hacer” para hacerle frente a la pandemia de Covid-19, por lo que no tienen los recursos para responder al pedido de las y los trabajadores.