Es tiempo ya de elecciones y los contactos entre dirigentes de diferentes fuerzas políticas se reproducen incluso más allá de los que se llegan a conocer. Circuló la versión de un encuentro entre el presidente Alberto Fernández y un exaliado suyo, el exministro Florencio Randazzo (foto), quien reapareció en estas últimas semanas dispensando fuertes críticas a la gestión del Frente de Todos y anunciando su postulación para diputado nacional. La versión dice que el encuentro, desmentido por la Casa Rosada, se habría realizado en la quinta de Olivos. Lo curioso de este rumoreado suceso es que la figura de Randazzo no pasa inadvertida para ningún sector. Es rechazado por los que están cercanos a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Por el contrario, hasta ahora Randazzo era mirado con simpatía por la dirigencia de Juntos por el Cambio ya que consideran que el exministro de Transporte divide votos en el peronismo. Sin embargo, ante la versión de un acercamiento con la Rosada, en el macrismo comenzaron a sentir que, de ser cierto, pueden ser víctimas de este acercamiento porque entienden que Randazzo puede llegar a pellizcarle algunos votantes. Esto, de cara a las elecciones legislativas de noviembre, no es una buena noticia para el macrismo, pero también puede generar algo de ruido dentro del Frente de Todos.