Finalmente serán Eduardo Farah, Mariano Llorens y Pablo Bertuzzi los tres integrantes de la Cámara Federal porteña quienes revisarán los 38 procesamientos que dictó el juez de Lomas de Zamora Juan Pablo Augé antes de que la Cámara Federal de Casación le sacara la megacausa de espionaje macrista. Los tres camaristas sortearon una serie de recusaciones cruzadas y ahora deberán empezar a analizar la situación de las máximas autoridades que tuvieron la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y el Servicio Penitenciario Federal (SPF), así como las de los espías conocidos como Súper Mario Bros, la exfuncionaria Susana Martinengo y del propio Darío Nieto, el secretario privado de Mauricio Macri, cuya falta de mérito fue apelada por varias de las querellas.
Llorens rechazó este miércoles las recusaciones que las partes habían presentado contra sus colegas Bertuzzi y Farah. El lunes, Leopoldo Bruglia había denegado por segunda vez un planteo para apartar al propio Llorens. Los otros dos integrantes del tribunal, Martín Irurzun y Roberto Boico, se excusaron de intervenir: Irurzun porque fue presuntamente espiado por los Súper Mario Bros y Boico porque fue abogado de Cristina Fernández de Kirchner, víctima de la vigilancia de la AFI y querellante en la causa.
A Farah lo quería correr el exdirector general de la AFI Gustavo Arribas porque declaró como testigo en la causa sobre la llamada “mesa judicial” del macrismo. Arribas es también uno de los acusados en esa investigación, que lleva adelante el fiscal Franco Picardi, porque participaba de las reuniones en las que se discutía la política judicial de Macri, lo que incluía definir qué jueces o fiscales iban a ser denunciados u hostigados para que dejaran sus cargos. En la AFI, la actual interventora, Cristina Caamaño, encontró varios mails convocando a esos encuentros.
Bertuzzi tenía tres recusaciones distintas. El exvicepresidente Amado Boudou, a través de su abogado Alejandro Rúa, pidió que se lo aparte porque llegó a la Cámara Federal --sin haber concursado-- después de condenarlo en el caso Ciccone. También plantearon su recusación los abogados Rafael Resnick Brenner y Jorge Chueco --que fueron víctimas del espionaje mientras estuvieron presos-- y el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, que denunció que el número de Bertuzzi aparecía en la agenda de Nieto, que fue peritada en Lomas de Zamora. Nieto es uno de los imputados en la causa y quien maniobró para llevarla a Comodoro Py.
Tras resolver estos planteos, el tribunal deberá ahora revisar los 38 procesamientos que dictó Augé y definir cómo sigue la situación de Nieto en la causa. La investigación está en manos de Marcelo Martínez de Giorgi, que espera las definiciones de la Cámara Federal para continuar con la pesquisa que hasta principios de año llevaron adelante los fiscales Cecilia Incardona y Santiago Eyherabide.