Phoenix Suns se consagró campeón de la Conferencia Oeste al vencer por 130-103 a Los Angeles Clippers en el Staples Center angelino, con lo que cerró la serie por 4-2 y se ganó el derecho a jugar la final de la NBA ante el vencedor del Este que surgirá entre Milwaukee Bucks y Atlanta Hawks.
El partido dejó de ser parejo cuando surgió la figura del base Chris Paul con su jerarquía y experiencia, desequilibrando al sumar 41 puntos (9-16 en dobles, 7-8 en triples y 2-3 en libres), ocho asistencias, cuatro rebotes, convirtiéndose en el undécimo máximo asistidor de los Playoffs de la NBA, tras superar la marca de Michael Jordan con 1.023 pases, quedando a 17 de la marca de Kobe Bryant, el décimo de la lista. Devin Booker le siguió con 22 puntos y el tercer máximo anotador fue Joe Crowder con 19, mientras que el bahameño DeAndre Ayton brilló con 17 rebotes y 16 puntos.
Los Clippers, que nunca pudieron disimular la ausencia de Kawhi Leonard en este duelo, por una lesión en la rodilla derecha sufrida en las semifinales ante Utah Jazz, estuvieron siempre lejos en el marcador. Paul George, con muy poco, fue uno de los rescatables con 21 unidades y nueve rebotes, mientras que Marcus Morris fue el máximo anotador con 26 tantos y nueve rebotes.
Los dos armadores titulares no marcaron diferencias, ya que Reggie Jackson acabó con 13 puntos y ocho asistencias, mientras que Patrick Beverley sumó 11 tantos.
Los de Phoenix, que nunca han ganado el título de la NBA, disputarán así sus primeras finales desde la temporada 1992-1993, en la que con Charles Barkley al frente cayeron ante los Chicago Bulls de Michael Jordan.
El conjunto dirigido por Monty Williams eliminó en la primera ronda a los defensores del título, Los Angeles Lakers de LeBron James (4-1), y luego barrió a los Denver Nuggets, de Facundo Campazzo, en las semifinales del Oeste (4-0).
Los Suns fueron el segundo mejor equipo de toda la liga durante la temporada regular, con un balance de 51 victorias y 21 derrotas, y se quedaron solo por detrás de los Utah Jazz (52-20).
En la noche del jueves, Milwaukee Bucks, sin la presencia del lesionado ala pivote griego Giannis Antetokoumpo, será local ante Atlanta Hawks, en el quinto cotejo de la serie, al mejor de siete encuentros, que igualan 2 a 2 por la final de la Conferencia Este. El cotejo se jugará desde las 21.30 en el Fiserv Forum, de Milwaukee, y el sexto partido tendrá lugar el sábado próximo en el mismo horario en el State Farm Arena.
Los Bucks tendrán la ausencia de Antetokounmpo, de 26 años y 2,11 metros, quien sufrió una hiperextensión en la rodilla izquierda, que si bien no le produjo ninguna rotura en el ligamento cruzado anterior, no le permitirá seguir en la competencia durante este campaña. Para entender la enorme pérdida de Milwaukee vale señalar que Antetokounmpo antes del cuarto juego promediaba 30,7 puntos, 10,7 rebotes y 6,3 asistencias, por lo tanto, por más que nada está definido, las chances de los Bucks han perdido consistencia.