La Fiscalía de La Rioja imputó hoy por "abuso simple" al concejal radical Enrique Balmaceda, de la alianza Juntos por La Rioja, tras la denuncia presentada por una trabajadora que milita en ese espacio político.
La denuncia se encuentra ahora en el Juzgado de Violencia de Género a cargo de Karina Cabral. Mientras la defensora de Balmaceda Soledad Varas, aseguró que hasta hoy su defendido no había sido notificado por la fiscalía.
La joven denunciante, ex integrante de la Juventud Radical, declaró que el hecho habría sucedido el 23 de enero del 2020. Aparte de este delito también habría denunciado situaciones de hostigamiento laboral posteriores al hecho por lo que solicitará medidas de protección por su seguridad.
De acuerdo al escrito presentado, la denunciante culpa al edil de haber intentado abordarla mientras estaban en el departamento del concejal. La joven denunció que Balmaceda recibió un llamado de su madre, ocasión que aprovechó para poder escapar del departamento. Insistió en que el concejal la había acosado y hostigado en innumerables ocasiones desde entonces, en privado y en público, y hasta en reuniones de trabajo. También destacó que la descalificaba y que "me insultaba recalcándonos a todos, en especial a mí, que yo tenía trabajo gracias a él".
Hoy colectivos feministas locales y amigas y amigos de la joven se autoconvocaron en el Concejo Deliberante de la capital riojana para visibilizar la denuncia y presentar un pedido de juicio político al concejal, pero se encontraba cerrado y sin personal para recibir la nota. Denunciaron que “hay una decisión política de imposibilitar la presentación del pedido de juicio político contra Balmaceda”.
Una amiga de la denunciante, Jenifer, destacó que “el abogado realiza actuaciones para ingresar el pedido vía mail y en los próximos días vamos a insistir de manera formal”. Además, sostuvo que "la víctima no ha elegido mediatizar el caso, y no estamos alentando una movilización como se dijo, no lo queremos politizar, somos un grupo de amigos pidiendo respuestas”.
Jennifer remarcó que "necesitamos respuesta de la justicia, pero también de la política. Hay un silencio cómplice y eso venimos a denunciar. No podemos tener más representantes de este tipo. Debe tener tolerancia cero venga de donde venga”.
En esa línea, apuntó que "sabemos que no es la primera denuncia de este tipo que ha tenido Balmaceda, hay antecedentes en la ciudad de Rosario, pero ya han pasado muchos años y las víctimas decidieron no seguir con este proceso”. Y contó que recibieron denuncias vía redes sociales, por parte de mujeres que "denuncian violencia política, institucional y laboral por parte del concejal, pero no podemos contarlo nosotras". Sin embargo, señaló que las denuncias "deberán hacerlas las propias víctimas cuando lo crean necesario".