Si todo sale normalmente, el martes se firmará el primer contrato con un laboratorio norteamericano por la provisión de vacunas: será con Johnson&Johnson o Moderna, las dos que ya dieron el ok. El acuerdo con Pfizer también se está terminando, pero no se llega al martes. “Se preservaron las necesidades de los laboratorios y a la vez sostuvimos los intereses del Estado", dijo este sábado la ministra de Salud Carla Vizzotti, sobre el DNU y los acuerdos. En paralelo, también el martes se firmará un convenido de donación del gobierno de Estados Unidos al gobierno de la Argentina de 2.500.000 dosis de vacunas producidas por los tres laboratorios norteamericano. Ese convenio no se podía firmar sin el arreglo con los laboratorios porque se requerían las garantías y seguros. Se supone que el acuerdo de donación será suscripto por un funcionario del Departamento de Estado y el embajador argentino en Washington, Jorge Argüello. En paralelo, hay rumores en la capital norteamericana de que Joe Biden anunciaría nuevas donaciones.
El lunes es feriado en Estados Unidos y por esa razón se quedó en el martes para concretar las firmas. La Casa Rosada mantiene la confidencialidad sobre cuál es el laboratorio con el que se firma el primer contrato. Sin embargo, fuentes de Pfizer revelaron que para su contrato todavía faltan unos días, de manera que el martes el convenio será con Johnson&Johnson o Moderna.
En ambos casos todavía está pendiente la autorización de la Anmat. La versión es que el organismo de contralor argentino daría el visto bueno en pocos días, algo que se venía rumoreando. Es trascendente en los dos casos por varias razones:
*Moderna está avanzando hacia la autorización para que se aplique a menores.
*Johnson&Johnson es de una sola dosis y resolvería el problema con muchas personas reacias a inscribirse y vacunarse.
*Las dos vacunas son candidatas a una combinación con las que ya se aplican en la Argentina.
De igual o mayor importancia es la firma del convenio con el gobierno de Washington. Las cantidades del primer envío están claras: dos millones y medio de dosis de vacunas de Pfizer, Moderna y Johnson&Johnson. En Estados Unidos dicen que podrían enviarlas todavía en julio, pero dependerá de la velocidad con la que se firmen los contratos y las vacunas sean aprobadas por Anmat.
En Washington hay fuertes rumores de que Biden anunciaría nuevas donaciones. No se trata de un ataque de nuevo humanitarismo, sino que en el gobierno de Estados Unidos está ahora la convicción de que es imprescindible vacunar al mundo entero para evitar nuevas variantes y, sobre todo, que el virus vuelva a afectar a la economía norteamericana.
El DNU que firmó Alberto Fernández en la noche del viernes fue producto de largos meses de negociaciones, sobre todo en los términos que tienen que ver con las responsabilidades ante juicios por muertes o daños a la salud y también puntualmente en lo referido a las garantías en caso de que haya que pagar indemnizaciones. El texto se conversó en extensas reuniones por Zoom en las que estuvieron la ministra Vizzotti, la asesora presidencial Cecilia Nicolini, la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, representantes de los laboratorios y funcionarios del Departamento de Estado. Por eso, una vez publicado el DNU, se espera que los contratos y convenios fluyan más o menos rápido.
La Argentina recibió y recibirá en julio una enorme cantidad de vacunas -seguramente más de 15 millones de dosis- de manera que estos acuerdos tienen más peso en lo político que en el campo de la salud. Es normalizar las cosas con Washington no poniendo obstáculos a una donación y terminar con una de las tantas polémicas con la oposición. Al mismo tiempo, se abre el abanico de vacunas, por lo que la Argentina tendrá todas las que hoy se ofrencen internacionalmente