El Reino Unido sigue con preocupación el avance de la variante Delta de coronavirus, más contagiosa que el resto y sobre la que todavía está en estudio la efectividad de las vacunas.
En este sentido, los organismos de salud informaron que entre los 92 mil casos registrados de esta mutación sólo 117 personas murieron, lo que representa el 0,12 por ciento. Sin embargo, el 43 por ciento de los fallecidos habían recibido las dos dosis de alguna vacuna.
Según datos publicados en el Public Health England, la variante Delta causó 117 muertes entre los 92.000 casos registrados hasta el 21 de junio. La preocupación de los especialistas es que 50 de los fallecidos contaban con el esquema completo de vacunación.
Del total de las personas infectadas por la variante originada en la India sólo murió el 0,12 por ciento, y el 0,05 estaba completamente vacunado.
Según los expertos, “el riesgo de morir por COVID-19 aumenta considerablemente con la edad” y otras enfermedades preexistentes. Especialistas concluyeron que si una vacuna reduce el riesgo de muerte de una persona de 80 años por COVID-19 en un 95 por ciento, por ejemplo, el riesgo de muerte de esa persona podría ser aún mayor que el que enfrenta una persona de 20 años no vacunada. Algunas enfermedades crónicas como la diabetes, la hipertensión y las enfermedades pulmonares también se asocian con un mayor riesgo de enfermedad grave y muerte.
De las 50 muertes en personas con esquema de vacunación completo en Inglaterra, todas ocurrieron en pacientes de más de 50 años, según mostraron los datos, que destacaron que no se registraron muertes en menores de esa edad con dos vacunas.
Pese a la preocupación por el aumento de los contagios por la variante Delta, el primer ministro británico, Boris Johnson, anunció este lunes que, si todo avanza según lo previsto, el 19 de julio se eliminarán las restricciones contra la covid en Inglaterra, de modo que llevar mascarilla o mantener la distancia personal pasarían a ser opcionales.
En una rueda de prensa, Johnson precisó que, si el 12 de julio se confirman los datos epidemiológicos favorables, la semana siguiente desaparecerán las "limitaciones legales" y podrán reabrir los sectores aún cerrados de la economía, como algunos grandes eventos y el ocio nocturno.
Las autoridades británicas consideran que el éxito del plan de vacunación iniciado en el Reino Unido consiguió romper el vínculo entre los contagios y la gravedad de la enfermedad, ya que no se registró un fuerte incremento de las hospitalizaciones y las muertes.
Según adelantan los medios británicos, Johnson apelará a la responsabilidad personal, en donde cada uno deberá evaluar el nivel de riesgo a la hora de decidir, por ejemplo, si usa la mascarilla en el transporte público.
Hasta ahora, el 86 por ciento de la población adulta en el Reino Unido recibió la primera dosis de la vacuna y el 63,8 por ciento de ellos, la pauta completa de vacunación.