El gobierno busca avanzar con la construcción de una planta de fabricación de celdas y baterías de litio con el objetivo de abastecer las demandas del Estado y el sector productivo. La producción inicial se estima que oscilará entre 5 y 9 megavatios-hora por año (MW.h/año), según informó el Ministerio de Ciencia a través de un comunicado. El organismo no comunicó plazos ni cuál será el monto de la inversión.
Argentina se encuentra en cuarto lugar en cantidad de reservas probadas de litio, aunque dependiendo de las fuentes, puede aparecer tercero, y posee entre el 25 y 30 por ciento de los potenciales recursos del denominado “triángulo del litio”, que integra junto a Bolivia y Chile. Los salares son en la actualidad la fuente más importante de litio.
El litio posee diversos usos, el más extendido es en baterías (teléfonos celulares, computadoras, herramientas eléctricas y vehículos eléctricos, entre otros). Hay otras aplicaciones no tan conocidas como agregado en vidrios y cerámicas para hacerlos más resistentes a los cambios de temperatura. También se emplea en grasas y aceites que resisten calor, en aleaciones junto a aluminio y cobre para alivianar componentes estructurales de la industria aeronáutica, en la elaboración de polímeros y filtros de aire, entre otros usos.
La producción de celdas actualmente está casi absolutamente concentrada en China, Japón y Corea del Sur. La batería es un negocio de altísima rotación y mínima rentabilidad, por lo que hay que tener un proceso muy optimizado para poder competir. Paul Graves CEO de Livent, subsidiaria de la estadounidense FMC, que explota el proyecto Fénix en Catamarca, remarcó en un seminario reciente que Australia y Chile fallaron cuando se propusieron fabricar baterías de litio, pero el gobierno argentino apuesta a insertarse en determinados nichos incorporando tecnología ya desarrollada con aplicaciones específicas y los aportes que pueda hacer la red tecnológica y productiva nacional
Con ese objetivo el Ministerio de Ciencia firmó un Memorando de Entendimiento con el Ministerio de Defensa, el CONICET, la Universidad de la Plata, el Instituto de Investigaciones Científicas y Técnicas para la Defensa, el Ministerio de Producción, de la Provincia de Buenos Aires, la Comisión de Investigaciones Científicas de dicha provincia e Y-TEC. El objetivo es avanzar con la ejecución del proyecto de diseño, instalación, configuración y puesta en funcionamiento de una planta de fabricación de celdas y baterías de Litio.
Se procura desagregar el paquete tecnológico respecto del diseño y la fabricación de las celdas y baterías, con miras a la definitiva incorporación de la tecnología y generando, de este modo, las condiciones propicias para el desarrollo de futuras plantas similares o de mayor porte.
“El litio es uno de nuestros objetivos, somos un país que tiene enormes reservas y con este proyecto nos proponemos agregarle valor”, aseguró el ministro de Ciencia, Roberto Salvarezza.
“Estoy muy contento de dar este paso, quiero hacer una pequeña referencia a Y-TEC, porque se deriva de la recuperación de YPF para el Estado Nacional, se habla poco de eso, pero lo que recuperamos cuando recuperamos YPF con mayoría estatal fue la capacidad de invertir en investigación más desarrollo más innovación, y para un país que aspira a ser industrial como el nuestro, en ese marco la posibilidad de ser un país industrial en términos competitivos está ligado al crecimiento económico con igualdad social”, expresó a su turno Agustín Rossi durante la firma.
Mientras que la presidenta del CONICET, Ana Franchi, recordó: “Hace un año y medio cuando nuestro Presidente asumió dijo ‘vengo a poner a la Argentina de pie’, y claramente se fue demostrando que eso no se puede lograr sin poner la ciencia, la tecnología y la universidad de pie”. Además, en referencia al acuerdo firmado, Franchi aseguró que “demuestra que la ciencia, la tecnología y la educación son claramente una inversión hacia el futuro, hacia la producción”.
A su turno, el ministro de Producción bonaerense, Augusto Costa, afirmó: “Estamos muy orgullosos de este proyecto. Desarrollar esta planta productiva en vinculación con el sector científico tecnológico nos va a permitir producir baterías de litio adaptadas a las necesidades y a las demandas bonaerenses. Y además, nos va a dar la posibilidad de estudiar, conocer y mejorar el proceso productivo y los componentes de un insumo que es estratégico en el marco de los procesos de transición energética y de los nuevos paradigmas de movilidad”.
El presidente de Y-TEC, Eduardo Dvorkin, expresó que “la industrialización del litio en el país es una oportunidad única para crear valor agregado” y que “esta nueva planta permitirá convertir conocimiento científico en tecnología y servirá de base para futuros emprendimientos nacionales”.