El director científico de Pfizer, Mikael Dolsten, notificó que el laboratorio solicitará próximamente a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos la autorización de uso de emergencia de una tercera dosis de refuerzo de su vacuna contra el coronavirus.

"La vacuna Pfizer es muy activa y efectiva contra la variante Delta, pero después de seis meses, es probable que exista el riesgo de reinfección a medida que los anticuerpos, como se predijo, disminuyen", indicó Dolsten.

Tal es así que, Pfizer, que creó uno de los primeros antídotos contra el SARS-CoV-2 junto a Bio-N-Tech, ya arrancó con los ensayos clínicos de las terceras dosis o "booster".

Al respecto, Dolsten sostuvo que los primeros datos demostraron que un tercer complemento de refuerzo genera niveles de anticuerpos que "son de cinco a 10 veces más altos que después de la segunda dosis". No obstante, aclaró que el suero producido en Estados Unidos es efectivo en un 95 por ciento contra enfermedades graves producidas por el virus.

En declaraciones previas, el director ejecutivo de la compañía, Albert Bourla, había expresado que las personas probablemente necesitarán una dosis de refuerzo de la vacuna de la compañía cada 12 meses, similar a una vacuna anual contra la gripe, pero es una posibilidad que todavía tiene que ser investigada.

El petitorio del laboratorio estadounidense se da luego de que comenzarán investigaciones en Israel -cuya campaña de vacunación es la más exitosa detrás de EE.UU- que en las últimas semanas tuvo un repunte considerable de casos, y esta situación obligó al Gobierno a dar marcha atrás con el levantamiento de varias restricciones.

Muchos de estos rebrotes estuvieron relacionados con la variante Delta, que ya está presente en 92 países y encendió las alarmas en todo el mundo.