Luego de que saliera a la luz que el Gobierno de Mauricio Macri envió armamento militar para apoyar a la dictadura de Bolivia, el exministro de Gobierno de ese país Hugo Moldiz aseguró que el material arribó apenas dos días después del inicio del golpe de Estado y deslizó que pudo haber sido utilizado para cometer las masacres de Senkata y Sacaba, días más tarde, donde hubo más de 20 muertos y decenas de heridos.
Moldiz, ministro de Gobierno de Evo Morales, criticó por AM750 el envío de armamento militar dispuesto durante la gestión de Macri y analizó que “está claro que hubo un frente internacional en el golpe de Estado, del que no podían estar ausentes la Organización de Estados Americanos y los Estados Unidos”.
El envío de material militar fue revelado ayer por el gobierno de Bolivia, que remitió al embajador argentino en ese país, Ariel Basteiro, un documento que detalla el armamento enviado el 12 de noviembre por el gobierno de Macri, que incluía 40.000 cartuchos AT 12/70, gases lacrimógenos y más de un centenar de granadas.
La cronología
Tras varias jornadas de amenazas y levantamientos militares, el golpe de Estado contra Evo Morales se concretó el 10 de noviembre de 2019, tres semanas después de que el presidente boliviano se impusiera en las elecciones de cara a su tercer mandato.
La renuncia forzada de Evo Morales se produjo luego de que el propio comandante de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman, le “sugiriera” al Presidente dar un paso al costado.
La sospecha que expresó Moldiz esta mañana en diálogo con AM750 es que las municiones enviadas por el gobierno de Macri habrían llegado el 12 de noviembre. Es decir, que por lo menos fueron solicitadas con un día de antelación.
“Es un dato importante porque confirma que ya el 10 de noviembre se había consolidado el golpe de Estado y que la autoproclamación de Jeanine Áñez el 12 fue un libreto que trataba de legitimar a un gobierno civil-militar que ya actuaba en las sombras”, remarcó Moldiz.
“La OEA y Estados Unidos no podían estar ausentes”
Moldiz apuntó además al rol que tuvieron tanto la Organización de Estados Americanos como el gobierno de los Estados Unidos en el golpe a Evo Morales.
“Está claro que hubo un frente internacional, del que formaron parte Iván Duque, Jair Bolsonaro, ambos presidentes que fueron visitados por (Luis Fernando) Camacho un mes antes, como preparando el terreno para tener respaldo”, remarcó.