La ex ministra de Seguridad del macrismo, Patricia Bullrich, intentó despegarse del escándalo por el envío de material bélico hecho en 2019 por la administración de Juntos por el Cambio al gobierno de facto de Bolivia. Admitió el envío de gendarmes a ese país pero dijo: "Nunca pasó por mis manos pedido alguno de material para la Fuerza Aérea Boliviana”.
A través de un texto publicado en las redes sociales, la ex funcionaria hizo un insólito relato de lo ocurrido en esos días. “Se hizo todo lo contrario a lo que manifiesta el presidente (Alberto) Fernández”, afirmó en referencia a lo que, en rigor, fue inicialmente una denuncia pública del gobierno boliviano a cargo de Luis Arce sobre la base de una documentación diplomática emitida por el entonces jefe de la Fuerza Aérea Boliviana golpista, Jorge Gonzalo Terceros Lara.
En esa misiva, Terceros Lara agradecía al gobierno de Macri, a través del entonces embajador en Bolivia, Normando Álvarez García, "la colaboración prestada" con “material bélico de agentes químicos” para ser usados en " la situación conflictiva que vive Bolivia". Lo que luego hizo Alberto Fernández fue repudiar ese hecho y pedir disculpas en nombre del Estado argentino.
A pesar de la existencia de esa documentación, Bullrich negó el escándalo pero, sobre todo, hizo un esfuerzo por desmarcarse de cualquier atisbo probatorio de que todo hubiera ocurrido tal como lo dice la diplomacia, con firmas y sellos.
“Nunca pasó por mis manos pedido alguno de material para la Fuerza Aérea Boliviana”, escribió la presidenta del PRO y referente de Juntos por el Cambio, que sin embargo no pudo negar que sí tuvo algo que ver con el envío de personal de Gendarmería, la fuerza que estaba bajo su órbita.
“Nuestro país colaboró con Bolivia enviando gendarmes para proteger la Embajada de Argentina en La Paz, en la que se encontraban miembros del gobierno de Evo Morales, incluido su Ministro del Interior, protegidos en nuestro territorio” diplomático, escribió.
Además, agregó, “Gendarmería evacuó de un hotel a periodistas argentinos que estaban en peligro y a funcionarios del gobierno boliviano, y los acompañó hasta la frontera. Entraron a la Argentina por Salta, donde pidieron asilo”.
Lo que Bullrich no explicó es por qué el personal de Gendarmería llevó en ese vuelo un cargamento que no fue detallado en la documentación pero que podría ser el “material bélico” del que dio cuenta la Fuerza Aérea Boliviana.
Este dato está registrado en una documentación que el ministro de Defensa, Agustín Rossi, reveló esta mañana y que detalla que cuando ese Hércules C-130 llegó a Bolivia durante la madrugada se procedió a la “descarga de personal de gendarmería nacional y su carga”.
Luego, la ex ministra de Seguridad dio una insólita versión de lo hecho por el gobierno de Macri en esos días, en el que abiertamente respaldó la dictadura de Jeanine Añez. Dijo que con el envío de gendarmes “se ayudó a los funcionarios de Evo Morales, se resguardó la Embajada Argentina y a los periodistas que estaban bajo el asedio de los manifestantes”.
“Todo esto fue público y se transmitió en directo por todos los medios; incluso la llegada de los gendarmes argentinos en un avión Hércules”, insistió pero siguió sin hablar del cargamento que la Fuerza Aérea le agradeció a Juntos por el Cambio.