Contaminantes

En 2004, la Municipalidad y la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) firmaron un convenio que establece la realización de sondeos sobre la concentración de contaminantes en el aire que debían ser realizados una vez al mes a través de estaciones de medición pasiva, las cuales se localizaban en diversos puntos fijos de la ciudad. Los últimos datos a los que pudimos acceder son de 2008, y los conocimos extraoficialmente a través un boletín informativo de la propia UTN, que establece que en el centro rosarino se detectó un crecimiento de dióxido de nitrógeno y es posible que la tendencia se mantenga o se profundice. El crecimiento del parque automotor aparece como causa principal, de ahí que en el centro se observen los niveles más elevados de dicho compuesto químico que es producto de la combustión a altas temperaturas como la que se da en los vehículos motorizados. También complican el panorama los edificios cada vez más elevados y los árboles añosos de gran altura que impiden la difusión de los contaminantes hacia las altas capas de la atmósfera.

Desde el inicio del convenio, los estudios fueron remitidos al Departamento Ejecutivo de modo continuo hasta 2016, pero dicha información nunca fue a su vez derivada al cuerpo legislativo local, como se le fue solicitando. La falta de acceso a los resultados de estos estudios dificulta no sólo la tarea de control, sino también el diseño de políticas y estrategias que mejoren la sustentabilidad ambiental y el bienestar de los rosarinos. La Organización Mundial de la Salud y Naciones Unidas confieren gran importancia a la temática de la calidad del aire al incluirla en sus agendas. Estoy convencida de que la intendencia no da a conocer los resultados y niega la información al Concejo porque carece de alternativas e ideas para solucionar el problema; y que de persistir los resultados obtenidos en 2008 darían cuenta de una crítica calidad ambiental enááreas muy pobladas de la ciudad. Es una omisión maliciosa: no se puede ocultar la realidad debajo de la alfombra. Lo que hay que hacer es poner los datos sobre la mesa, analizarlos y ver de qué manera se pueden modificar positivamente.

Fernanda Gigliani

Concejala de Iniciativa Popular