Desde Santa Fe

El paso de Mauricio Macri dejó en un segundo plano un cortocircuito político entre Miguel Lifschitz y José Corral, quienes el martes debían inaugurar un nuevo alumbrado público en el norte de la ciudad, que financió la provincia, pero las farolas nunca se encendieron. Corral estaba al tanto del supuesto "problema técnico" porque ni se acercó al barrio, pero a Lifschitz lo anoticiaron en el camino y "no lo podía creer". Lo salvó del papelón su ministro de Gobierno, Pablo Farías, quien tuvo que poner la cara ante los vecinos que se convocaron al acto frustrado y calmar el enojo. Farías acusó: "Es lógico pensar que hubo mala intención". "Lo llamativo -dijo‑ es que el nuevo alumbrado se probó durante la semana y funcionaba". La obra demandó una inversión de 2 millones de pesos que aportó el gobierno provincial y fue ejecutada por el municipio.

El ministro de Gobierno llegó a horario al acto, pero ante el apagón y la ausencia de Corral, llamó a Lifschitz y le dijo que se volviera a la Casa Gris. "No podía creer lo que pasaba", comentó. "Es inentendible" el faltazo del intendente y sus funcionarios y la falta de "explicaciones razonables", por eso "es lógico pensar en la mala intención".

Farías compartió el malestar de los vecinos. "Vinieron hasta acá y se fueron frustrados porque no se pudo inaugurar una obra que se hizo por pedido de ellos. La provincia aportó los fondos y hubo un trabajo mancomunado con todas las instituciones del barrio Nueva Pompeya", explicó. "Lamentamos mucho esto y sobre todo la ausencia de funcionarios municipales, la falta de respuestas y si había un problema técnico que no podían resolver, que nadie nos avisara a tiempo. Nos preocupa mucho esto", agregó.

Ante una pregunta, Farías explicó que la responsabilidad de garantizar el alumbrado es del municipio. Las luces funcionaron durante la semana. "Por eso, es lógico que haya sospechas de mala intención, así que vamos a esperar una explicación razonable", dijo.

-‑¿Esto va a quedar como la inauguración que no fue? --le planteó un colega.

-‑Y con mucha vergüenza porque un acto de estas características es una frustración muy grande. Nosotros no tenemos responsabilidad, pero si nos hubieran avisado que había un problema técnico no molestábamos tantos vecinos que fueron al acto --contestó.

--¿Un problema técnico u otra cosa?

-‑Los pocos funcionarios con los que pudimos hablar de la Municipalidad nos dijeron que era un problema técnico, pero nadie nos avisó.