La UCR avanza en armarle una lista en la provincia de Buenos Aires que desbanque a Diego Santilli, el candidato de Horacio Rodríguez Larreta. El primer paso fue conseguir que el neurocientífico Facundo Manes aceptara encabezar la lista. Luego plantearon que si querían lista de unidad, la UCR debía mantener ese lugar. Ahora están reuniendo al resto de los dirigentes del PRO que no acompañan al jefe de Gobierno porteño. La novedad es que llegaron a un acuerdo con el extitular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, quien no presentará una lista propia e irá en la boleta con Manes. También confirmaron que la líder del GEN, Margarita Stolbizer, acompañara al neurocientífico, probablemente en el segundo lugar. Y el exministro de Gobierno de María Eugenia Vidal, Joaquín De la Torre, también será de la partida. En tanto, Larreta no logra convencer al intendente de Vicente López, Jorge Macri, de que se baje. Si el PRO va dividido, tanto mejor para los correligionarios.
La vicepresidenta de la UCR nacional Alejandra Lordén fue la encargada la semana pasada de dejar en claro que para el radicalismo o Manes encabeza o hay internas. Los radicales están decididos a cambiar el balance de poder interno en Juntos por el Cambio y dejar de ser el socio menor frente al PRO. Una victoria en la interna de la provincia de Buenos Aires, ciertamente, podría lograr ese objetivo.
Por eso, fueron varios los que insitieron --y finalmente consiguieron-- convencer a Manes de que se lance a la política. Lo mismo hicieron en la Ciudad con Martín Tetaz, aunque en ese caso la única interna será con Ricardo López Murphy (ver aparte). El senador Martín Lousteau tuvo bastante que ver con esas incorporaciones a las listas.
Pero la acción de la UCR bonaerense, comandada por Maximiliano Abad, no se detuvo ahí. Comenzaron conversaciones con dirigentes con los que Larreta mantenía buenas relaciones, como Emilio Monzó, al punto que había incluido a funcionarios de él en su gabinete porteño. Monzó hace tiempo que se siente afuera del armado electoral del PRO y la negociación con los radicales le dio oportunidad de recobrar protagonismo. Hasta ayer mismo, el dirigente estaba precalentando para encabezar su propia lista. Hasta había encarado una serie de spots donde destacaba su capacidad de diálogo, su moderación.
Ya no será el caso: Monzó no tendrá su propia lista, sino que se integrará con la de Manes. Todavía no estaba definido el lugar, pero podría ser --por la paridad-- o bien el tercer puesto o bien el quinto. Con su incorporación, no solo suman a un dirigente que supo tener peso en el PRO, sino a un peronista para pelearle el perfil a Diego Santilli, el elegido por Larreta. Monzó todavía no hizo ningún anuncio: primero iba a reunirse con sus dirigentes en Luján y comunicar el resultado de las negociaciones.
No es el único peronista que la UCR quiere sumar a Manes. También estuvieron negociado con el exintendente de San Miguel Joaquín de la Torre, quien no parece tener la mejor opinión con el arribo de Santilli a la provincia ni tampoco con la partida de Vidal hacia la Ciudad de Buenos Aires. A De la Torre lo habían sondeado desde el espacio de Florencio Randazzo, habida cuenta de ese malestar con las decisiones del PRO. Parece que finalmente lo capitalizarán los radicales.
Para un político que tiene la estrategia de mantener a todos los aliados adentro, la partida de Monzó y De la Torre -aun si es solo temporal- es una mala noticia.
Y no es la única: es probable que Manes presente en unos días, cuando cierren las listas, a Margarita Stolbizer. Por muchos años, la candidata a gobernadora de la oposición al peronismo, la dirigente vio con buenos ojos que el neurocientífico se sume a la arena política y es probable que lo acompañe. A Stolbizer también la habían tentado desde múltiples fuerzas políticas, pero parece que terminará nuevamente con los viejos correligionarios a los que hace algunos años les dijo adiós. Y si finalmente decide no ser candidata, igualmente lo acompañará en la campaña.
Mientras la lista de Manes comienza a tomar volumen, Larreta intenta por todos los medios que no haya dos listas del PRO que dividan el voto para competirle. Para eso, tiene que lograr que Jorge Macri se baje. Tuvo el lunes un nuevo encuentro con el intendente de Vicente López, pero no llegó a ningún acuerdo. El dirigente bonarense sigue exigiendo que el que se baje sea Santilli. Y tener el manejo de las listas para el cierre. Tiene todavía el apoyo de la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, con la que comió hace algunos días. Cuando se bajó de la interna porteña, Bullrich dijo que esperaba que "otros siguieran su ejemplo". No dijo quién, ni si tenía cabello colorado.
El martes por la tarde, se reunieron las autoridades de Juntos por el Cambio de los tres partidos para definir cuestiones legales, como los apoderados, y otras cuestiones previas al cierre de la inscripción de alianzas de este miércoles. Entre otros, estuvieron Jorge Macri y el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, quien oficializó su respaldo a Santilli. Quien brilla por su ausencia en la alianza bonaerense de Juntos por el Cambio es José Espert, a quien Larreta quería sumar como aliado, pero Jorge Macri buscó bloquear con pisos altos para poder entrar en la lista definitiva. En la sede de Parque Patricios, indicaban que no estaba definido si se sumará a la alianza, mientras que en el PRO bonaerense ya daban ese acuerdo por caido.