"Es un sueño cumplido", expresó Claudia del Prado, directora de la Escuela Técnica N° 3.144, Capitán Marcelo Pedro Lotufo, después de que recibieran más de $100 millones del gobierno nacional para la construcción de la primera etapa de su nuevo edificio. Se trata de la única institución en su tipo en todo el Noroeste Argentino y una de las cinco existentes en el país, dado que otorga una doble titulación: de técnico aeronáutico y mecánico de mantenimiento de aeronaves (MMA).
En diálogo con Salta/12 Del Prado afirmó que "es un orgullo y un hecho importantísimo" para toda la provincia. El lunes último se abrieron los sobres de la licitación de esta primera etapa de la obra, un nuevo edificio en el barrio Docente Sur. Para estas obras, los fondos provienen del Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET).
La docente no pudo evitar la emoción al recordar los diferentes cambios por los que pasó la institución desde su fundación en 1956, en los que nunca contó con un establecimiento propio. Actualmente imparte la tecnicatura en tres sedes: la de enseñanza básica, la de educación física y la de las prácticas profesionales. "Esta división en tres partes hace más compleja la tarea a los alumnos", indicó.
En esta primera etapa se construirá un hangar, el lugar utilizado para guardar y mantener aeronaves. La superficie de 1.515 metros cuadrados permitirá alojar dos aviones de porte pequeño (5 mil kilos) y un helicóptero. Además, se construirán oficinas para docentes, sanitarios, y cuatro laboratorios destinados a los instrumentos de aviación, neumática e hidráulica, así como de electrónica, y también la sala de ensayo de motores con aislamiento acústico para el encendido y la reparación, entre otras.
Actualmente el establecimiento tiene en su taller aeronáutico un avión francés de 1948, que puede visitarse. Sin embargo, Del Prado dijo que tienen la intención de sumar más unidades en desuso que sirvan para la práctica del mantenimiento.
Hoy la escuela tiene una matrícula de más de 550 alumnos, con un descenso de ingresantes en relación a años anteriores. Para la directora, uno de los factores en esos números es el constante movimiento que deben hacer sus estudiantes entre los tres edificios.
La planta docente está conformada por 117 profesores, de los cuales el 40% pertenece a la formación específica en aeronáutica. Sólo hay 5 ingenieros aeronáuticos en la institución.
Formación específica
La escuela "tiene una formación específica y por eso, somos la única en el Noroeste Argentino", expresó Del Prado. Además de la tecnicatura, sus egresados pueden optar por la doble titularización, ya que tienen la opción de solicitar la licencia de Mecánico de Mantenimiento de Aeronaves bajo supervisión (MMA) ante la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
La directora explicó que quienes opten por la licencia deben viajar a Buenos Aires y a partir de allí, trabajar en distintos países, para su validez internacional. Esto siempre y cuando sea bajo supervisión. Aseguró que entre 5 y 10 egresados por año hacen la solicitud en la ANAC. Sin embargo, se mostró preocupada porque el año pasado, los egresados no pudieron desarrollar plenamente sus prácticas profesionales debido a la pandemia.
En Salta se diseñan y comercializan partes de aeronaves en talleres particulares, los que funcionan muchas veces como sitios de prácticas, pero el año pasado esa posibilidad se redujo por el cierre de algunos de ellos o incluso con la limitación en los mismos aeropuertos. "Es amplio el trabajo que se puede hacer, pero la oferta no lo es", describió Del Prado.
Entre esas actividades prácticas, están las charlas y demostraciones sobre Ensayos No Destructivos (END), los simuladores de vuelo y el funcionamiento de tren de aterrizaje, impartidas en el taller aeronáutico.
Reconocimiento y homenaje
La institución nació a fines de diciembre de 1956, como una Escuela de Instrucción y Perfeccionamiento Aeronáutico (EIPA) perteneciente al gobierno de Salta. La modalidad de enseñanza era sólo de noche y dirigida únicamente para la aviación civil.
No obstante, a partir de la nueva Ley de Educación Nacional N° 26.206 (2006), se cambiaron las currículas y el establecimiento pasó a considerarse una escuela de enseñanza técnica. Aún así, mantenía su principal característica, de ser una de las cinco instituciones que otorga el título de técnico aeronáutico.
Otro de los cambios que atravesaron fue la denominación de la institución. En 1986, después de la Guerra de Malvinas, la familia del capitán Marcelo Pedro Lotufo pidió que la institución pase a denominarse con ese nombre. Lotufo fue un oficial fotógrafo, que murió un 7 de junio de 1982 cuando realizaba una misión de reconocimiento aerofotográfico sobre la Isla Borbón, a bordo del avión Lear Jet 35A.
En esa misión a Lotufo lo acompañaban el piloto y jefe del Escuadrón Fénix, el comodoro Rodolfo Manuel de la Colina; el copiloto, vicecomodoro Juan José Ramón Falconier; el operador de comunicaciones, el suboficial principal Francisco Tomás Luna, y el mecánico de aeronave, el suboficial ayudante Guido Antonio Marizza.
Desde entonces, sus nombres forman parte de la lista de los 55 Héroes, la más sagrada de la Fuerza Aérea Argentina y que recuerda a los aviadores muertos en la guerra en el Atlántico Sur.
