Ricardo Centurión se entrenó con normalidad y podría ir al banco de Boca el próximo sábado, cuando su equipo visite a Estudiantes por la 23ª fecha del torneo. Piedra basal en el esquema del entrenador Guillermo Barros Schelotto, la recuperación del ex jugador de Racing, que arrastraba dolores en su rodilla izquierda, fue muy positiva. De llegar a tener competencia frente al Pincha, su reaparición se producirá exactamente tres semanas después de haberse lesionado, período mucho más breve al que por lo común demanda un esguince de ese tipo. Por otra parte, Pablo Pérez le pidió disculpas al juvenil Tomás Fernández, a quien golpeó en una práctica y por lo que fue enviado a la ducha antes de tiempo por el cuerpo técnico.
La vuelta a los entrenamientos de Centurión fue la noticia del día de la práctica de Boca en el predio Pedro Pompilio. Hombre fundamental en la actual campaña, Ricky no estuvo presente hasta ahora en tres partidos, ante Patronato (1-1), Atlético de Rafaela (0-0) y Arsenal (3-0), lapso en que el equipo sintió su ausencia. Pero ayer volvió a trabajar con el grupo tras un esguince grado dos del ligamento colateral izquierdo, con la idea de llegar al Superclásico dentro de dos semanas por la 24ª fecha del torneo.
En este punto, el cuerpo técnico dosificará las cargas al talentoso volante a medida que transcurran los días. Y si bien analizan que vaya al banco de suplentes en la próxima fecha contra Estudiantes, en La Plata, todo parece indicar que volvería ante River. Además de los trabajos físicos, el ex jugador de Racing hizo ejercicios con pelota y participó en forma liviana de un táctico 11 contra 11, donde jugó adelante con Oscar “Junior” Benítez y Darío Benedetto. Cabe recordar que el Mellizo había dicho días atrás que Centurión volvería recién ante Newell’s, por la 25ª jornada.
Por otra parte, si bien el DT no paró un once titular, se agranda la posibilidad de que Pablo Pérez vuelva en lugar del juvenil Gonzalo Maroni para enfrentar al Pincha. De ser así, Pérez o Bentancur se adelantarían unos metros en la cancha para jugar de enganche, mientras que el colombiano Wilmar Barrios seguiría como volante por derecha.
Muy bien considerado por sus compañeros y por el cuerpo técnico por su talento y ascendencia en el grupo, el rosarino Pérez se calificó a sí mismo como un “viejo cascarrabias” por haberse alterado y reaccionado mal con el juvenil Fernández, y zanjó el incidente del martes. Boca entrena hoy y luego hablará Guillermo en conferencia de prensa.