Este jueves, la era del fútbol femenino semiprofesional entregará a su segundo campeón. Desde las 19.10 y en un encuentro que televisará TNT Sports, se enfrentarán en la final del Apertura Boca y San Lorenzo, los dos mejores y únicos invictos del torneo. El estadio Francisco Urbano de Deportivo Morón será el escenario de un partido que puede ser histórico: si las Santitas vencen, alcanzarán su primer título en los nuevos tiempos del deporte rentado, para sumar a las dos estrellas que ya tiene el club azulgrana. De ganar las Gladiadoras, llegarán ni más ni menos que a su conquista número 25 y serán las reinas absolutas de la nueva era.
Pase lo que pase, la previa de la final promete un partidazo que nadie que ame el fútbol debiera perderse. Y lo cierto es que, más allá del poderío de este Boca comandado por Christian Meloni, es San Lorenzo el que mejor llega a esta definición.
Si las de azul y oro sacaron una leve ventaja para adueñarse de la Zona A que compartían (con dos puntos y siete goles más), fueron las dirigidas por Nicolás Basualdo quienes tuvieron un mejor paso por las semifinales. De hecho, fueron las únicas que accedieron a esta final con una victoria: San Lorenzo superó por 1-0 a la UAI Urquiza mientras que el Superclásico se cerró con un empate por 2-2 y fue gracias a los penales que las xeneizes llegaron a la final.
El buen nivel de las semifinales del torneo Apertura deja en claro que, a esta altura, ninguno de los dos debiera confiarse. Porque tanto Boca como San Lorenzo sufrieron un poco para llegar a esta definición. Así como la arquera paraguaya Alicia Bobadilla contuvo un remate que se gritó como un gol en Boedo -a los 44 minutos del segundo tiempo-, antes había sido la defensora Julieta Cruz la que despejó en la línea un tiro que se celebró con igual calibre en el cruce superclásico. Las actuales campeonas, además, estiraron el sufrimiento hasta los penales y le deben una buena parte de su pase a la mala definición de las millonarias; River falló tres de sus remates y se quedó sin chances a pesar de una notable actuación de Florencia Chiribelo, con dos penales atajados..
Para la final, la posible formación de Meloni sería con Laurina Oliveros; Julieta Cruz, Florencia Quiñones, Miriam Mayorga, Eliana Stabile; Fabiana Vallejos, Constanza Vázquez, Clarisa Huber; Carolina Troncoso, Andrea Ojeda y Yamila Rodríguez.
Basualdo, por su parte, elegiría a Alicia Bobadilla; Cecilia López, Giselle Vidal, Sindy Ramírez y Florencia Coronel; Maricel Pereyra, Eliana Medina, Naila Imbachi y Sabina Coronel; Débora Molina; y Macarena Sánchez.
Las estadísticas dicen que se enfrentarán los dos mejores equipos de la era semiprofesional. Es que el equipo xeneize, desde que se inauguró el fútbol semirentado en la Primera División femenina, no perdió nunca: las Gladiadoras acumulan allí un invicto de 32 partidos sin derrotas. Pero San Lorenzo -que luce 10 partidos sin caídas- no se queda atrás. Las Santitas, en el mismo lapso, solo cayeron con un equipo: Boca, campeón del Torneo Transición y líder de aquel primer certamen suspendido por la pandemia, fue el único que pudo vencer al conjunto azulgrana. Lo hizo por la quinta fecha de aquel Torneo Rexona y por las semifinales de la competencia que coronó a las de Meloni. En este torneo, las campeonas no pudieron con las de Basualdo: su cruce en la octava jornada, arrojó un empate por 1-1, con goles de Yamila Rodríguez y Nicole Hain.
Más allá de los números, sí es cierto que llegan a esta final pareciéndose mucho. Tienen a las dos goleadoras del Apertura: Yamila Rodríguez y Débora Molina suman nueve gritos cada una. Lucen, posiblemente, a las dos mejores arqueras del torneo: Laurina Oliveros, arquera de la Selección argentina, y Alicia Bobadilla, custodia del arco de la Selección paraguaya, a quienes les hicieron siete goles en los diez partidos del certamen.
Las campeonas quieren seguir su supremacía sobre las azulgranas. Las Santitas se ilusionan con arrancarle una victoria a las Gladiadoras, para volver a coronarse luego de seis años sin alcanzar la máxima felicidad. San Lorenzo sueña de la mano de su segunda goleadora, Maca Sánchez, pionera luchadora rumbo al fútbol femenino profesional, con alzar su primer título en esta nueva era. Boca añora el segundo. Habrá un solo campeón, pero una cosa es segura: en busca de esa gloria, hay un partido que promete ser espectacular.