La justicia confirmó este jueves el procesamiento de Patricio Leonel Reynoso, acusado de arrojar por un balcón a su novia Pilar Riesco en marzo de 2020, en un edificio del barrio porteño de Nueva Pompeya, tras considerar que las pruebas han "desvirtuado o al menos cuestionado" la versión del detenido que asegura que la joven se suicidó.
Reynoso se encuentra detenido desde el 9 de junio pasado, cuando se entregó a la policía tras permanecer prófugo por más de dos meses.
La sala 5 de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, integrada por los jueces Rodolfo Pociello Argerich y Hernán Martín López, rechazó los argumentos de la defensa del detenido y mantuvo lo resuelto por la jueza de la causa, Graciela Angulo de Quinn, quien el 30 de marzo del año pasado procesó a Reynoso con prisión preventiva y le trabó un embargo por $931.500.
En un fallo de 10 páginas, la cámara indicó que "(…) el descargo ensayado por el imputado que, en líneas generales, alegó haberse defendido de la agresión desplegada por Pilar Riesco en el marco de la discusión (…), tras la cual aquella habría decidido súbitamente quitarse la vida, ha quedado desvirtuado, o al menos cuestionado, frente a la incontrastable evidencia que dio cuenta de la ausencia de rastros dactilares en la superficie de la baranda del balcón de la que se habría tomado Riesco antes de caer al vacío".
Los jueces también pusieron en duda la declaración de una testigo de la defensa, pareja de un amigo del acusado, quien refirió que "Pilar Riesco habría saltado al vacío, no arrojada por Reynoso".
A su vez, remarcaron que la historia clínica de Riesco que fue incorporada al expediente, "a diferencia de lo argumentado por la defensa, ratifica el contexto de violencia en el que se desarrollaba la relación con Reynoso, del que se tomó conocimiento inicialmente a partir de los testimonios de distintos familiares y allegados de la pareja".
Los magistrados recordaron que en el mismo sentido se había pronunciado la psicóloga que asistió a la joven en sus internaciones, quien declaró que "en una oportunidad, en la primera internación de Pilar, su madre le comentó que 'él (en referencia a Reynoso) había tomado del cuello' a su hija".
Por otro lado, la cámara tomó en cuenta la "mendacidad advertida en ciertos pasajes del descargo del imputado", así como "la cantidad de lesiones constatadas en el cuerpo de la víctima y, fundamentalmente, aquella verificada en la zona del cuello (…)", ya que "revelan que Reynoso habría ejercido una fuerza mayor a la desplegada por Pilar Riesco durante la agresión física previa al desenlace fatal, que excede la que podría esperarse en el marco de una acción de defensa".
Luego de estas consideraciones, los jueces concluyeron que "la hipótesis de suicidio introducida por el acusado en sus respectivos descargos pierde sustento frente a los nuevos elementos de convicción" incorporados al expediente.
Prisión Preventiva
Para confirmar la prisión preventiva, los camaristas señalaron que existe riesgo de fuga y de entorpecimiento de la investigación, por lo que "es altamente probable" que Reynoso, acusado por el delito de "homicidio doblemente calificado por el vínculo y por mediar violencia de género", "no se someta voluntariamente al proceso".
Asimismo, advirtieron que el joven "conoce a los familiares de la víctima" y "la madre de ésta (querellante) ha manifestado temor por su seguridad y la de su familia solicitando medidas de protección, a raíz de lo cual se le proporcionó un botón antipánico". La mujer, además, ha denunciado ante la justicia "haber sido víctima de amenazas por parte de Horacio Luis Barrionuevo (padrastro del acusado)".
Antecedentes
El 30 de marzo del año pasado, Angulo de Quinn procesó a Reynoso con prisión preventiva y le trabó un embargo por 931.500 pesos. Al mes siguiente, sin embargo, la sala V de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional revocó el procesamiento de Reynoso y lo liberó por falta de mérito, al considerar que no había pruebas suficientes para atribuirle un femicidio.
Con el correr de la investigación se sumaron elementos probatorios que llevaron al Ministerio Público Fiscal (MPF) a solicitar nuevamente su arresto y una ampliación de la declaración indagatoria, lo que fue acompañado por la jueza.
El acusado fue declarado en rebeldía el 31 de marzo de 2021 cuando la magistrada, a pedido del fiscal Martín López Perrando, ordenó su detención sin dar con el paradero del joven. Días más tarde, el 5 de abril, se libró su captura nacional e internacional y también se ofreció una recompensa de un millón y medio de pesos por datos sobre su paradero.
Finalmente, Reynoso se entregó a la policía el 9 de junio, tras permanecer prófugo más de dos meses. Su familia y amigos realizaron una movilización el lunes pasado para pedir la liberación del imputado. Durante la movilización, apuntaron contra la jueza e insistieron con la hipótesis del suicidio.
El caso
El episodio investigado ocurrió cerca de las 16.30 del domingo 15 de marzo de 2020, cuando la joven cayó del balcón del departamento "E" del cuarto piso de la calle Alagón 305, en Nueva Pompeya.
Según la investigación, Reynoso había regresado de bailar a las 8, se acostó a dormir y cuando se despertó comenzó una discusión prolongada con la joven, con quien convivía.
El imputado afirmó que Riesco comenzó a increparlo, a gritarle y a decirle que no lo quería. Según su relato, la joven en un momento le arrojó un portarretrato con una foto de ellos y luego fue al balcón y se tiró al vacío.
La fiscalía y la querella, en cambio, sostienen que Reynoso "le propinó golpes varios" que le causaron "múltiples" lesiones y luego la arrojó desde el balcón.