La actriz francesa Renée Simonot, nombre artístico de Renée-Jeanne Deneuve, murió ayer jueves en París a los 109 años, comunicaron sus familiares al diario francés Le Figaro. La viuda de Maurice Dorléac (motivo por el que también era conocida como Renée Dorléac) era la madre de las actrices Catherine Deneuve, Françoise Dorléac (fallecida en 1967) y Sylvie Dorléac, y abuela del actor Christian Vadim (el hijo de Catherine con el realizador Roger Vadim) y de la actriz Chiara Mastroianni (hija de Catherine con el gran Marcello).
Además de haber dado a luz a una de las estirpes más legendarias del cine europeo, Renée Simonot también cuenta con un pasado profesional dedicado a la actuación. Principalmente en el teatro, ya que debutó en las tablas del parisino Odéon a los siete años y se mantuvo como su actriz principal durante las siguientes décadas, hasta que cumplió 35 años. Fue allí donde adoptó el apellido Simonot como nombre artístico en homenaje a una amiga de su madre.
Además, Simonot fue una pionera actriz de doblaje en la industria francesa, comenzando como una de las primeras intérpretes en doblar con su voz las actuaciones del cine sonoro estadounidense que llegaba a Francia. Puso voz a actrices del Hollywood clásico como Olivia de Havilland, Sylvia Sidney, Judy Garland, Esther Williams y Donna Reed, entre muchas otras.
Fue así, doblando en francés las películas de MGM, como conoció en 1940 a su marido, el actor Maurice Dorléac. Después de la Segunda Guerra Mundial dejó prácticamente de lado su carrera profesional para dedicarse a criar a su familia. Deneuve, su apellido de soltera, pasó al nombre artístico de su hija Catherine, que esta semana se encontraba en el Festival de Cannes presentando la película De son vivant, de Emmanuelle Bercot, cuando se conoció la noticia.