El gobierno de Bolivia tiene identificado a un uniformado argentino que habría coordinado la entrega de las 70.000 balas antitumulto que llevó la Gendarmería cuando el golpe de Estado ya había derrocado a Evo Morales. Así lo confirmó el ministro de Gobierno de Estado Plurinacional, Carlos Eduardo Del Castillo Del Carpio, en diálogo con Página/12. El funcionario también explicó que esperan informes de la Fuerza Aérea para determinar si el material represivo enviado por la gestión de Mauricio Macri fue empleado en dos masacres y confirmó que existe un registro de que 26.900 cartuchos ingresaron a la Policía de Bolivia.
--¿Se puede considerar que la Argentina tuvo una participación necesaria en la sedición contra Evo Morales?
--Hay una serie de hipótesis que se están manejando. Lo que aquí tenemos certeza es que hay armamento que llegó de manera ilegal a través de un tráfico ilícito de armas. Una gran cantidad de ellas fue a parar a la policía boliviana, la cual no se utilizó porque estaba muy escondida. Estamos esperando los informes de la Fuerza Aérea para ver si el material argentino se ha utilizado en las represiones y las masacres de Senkata y Sacaba. Existe una diferencia entre esta cantidad de municiones y pertrechos de la Fuerza Aérea y la Policía boliviana con la cantidad que nos manifiesta el gobierno argentino.
--¿Pudo haber ido a otra fuerza el material faltante o ustedes suponen que se empleó?
--Una de las primeras hipótesis que estamos manejando es que la diferencia se habría utilizado en las represiones de Senkata y Sacaba. Inicialmente estamos investigando si se la otorgaron a grupos paramilitares, a personeros de las fuerzas armadas o de la Policía boliviana. Ya hemos descartado que haya ingresado material adicional a la Policía boliviana y, por tanto, estamos esperando los informes correspondientes y las verificaciones in situ para ver si no está este armamento en otro lugar.
--¿Estamos hablando de un universo de 70.000 balas antitumulto o considera que hay más todavía?
--El registro del gobierno argentino nos versa que habrían salido 70.000 cartuchos de goma. Esto nunca fue internado legalmente a nuestro territorio nacional. Vamos a seguir investigando esto porque tenemos conocimiento que 26.900 fueron a parar a la Policía boliviana, 40.000 a la Fuerza Aérea y estamos investigando adónde fue a parar la diferencia.
--¿Hay alguna razón por la cual la Fuerza Aérea pudiera tener balas antitumulto, ya que no interviene en cuestiones de seguridad interior?
--En un gobierno democrático, las fuerzas armadas no participan de la represión al pueblo, lo que ha sucedido en el período de noviembre de 2019 hacia adelante ha sido un golpe de Estado, apoyado por un grupo de las fuerzas armadas. Sí ha existido una represión no sólo con cartuchos de goma sino con municiones de guerra.
--¿Hay algún tipo de documentación que respalde que la Policía de Bolivia recibió únicamente 26.900 balas?
--Exactamente. Si bien es cierto que un personero de la República Argentina fue quien entregó esto a la Policía boliviana no hay un acta de constancia. Sin embargo, unos mayores de la Policía boliviana que habrían recibido este cargamento para ingresarlo a los almacenes realizaron un inventario de los agentes químicos en el depósito y ahí regulan que han existido 26.900 cartuchos evidentemente procedentes de Argentina.
--¿Está identificada la persona argentina que entregó el armamento?
--De manera extraoficial tenemos identificada a la persona. Estamos buscando los reportes, cámaras de seguridad y hacer un seguimiento de lo que sucedió el 13 de noviembre de 2019, tanto en los hangares de la Fuerza Aérea como en el exhotel Radisson de la ciudad de La Paz para ver si es la persona que hemos recibido los reportes de inteligencia. Una vez que confirmemos la identidad y tengamos la certeza sobre ello comunicaremos tanto al pueblo boliviano como al pueblo argentino de quién se trata.
--¿Es una persona que haya cumplido funciones en la embajada argentina?
--No sabemos si era militar, policía o de la Gendarmería argentina. Era un uniformado.
--¿Existen filmaciones del momento de la descarga del Hércules argentino?
--Tenemos un reporte extraoficial de que un militar boliviano de bajo rango habría filmado toda la descarga. Estamos tratando de conseguir las imágenes y, una vez que las obtengamos, seguramente serán difundidas conforme al marco legal vigente.
--¿Las investigaciones por tráfico de armas que tramitan en Bolivia podrían llegar a incluir a Macri o a exfuncionarios argentinos?
--Esto lo van a determinar las investigaciones conforme vayan avanzando. Inicialmente hemos presentado una denuncia a la justicia boliviana para que se investigue al excomandante de la policía boliviana, el coronel Yuri Calderón, y también al excomandante de la Fuerza Aérea, el general Jorge Terceros Lara. También estamos viendo que ha existido participación de personeros argentinos.
--¿Hay peligro de una nueva asonada ante esta investigación que está llevando adelante el gobierno?
--La derecha en nuestro país nunca duerme, al igual que en la región y el mundo. El gobierno del Movimiento Al Socialismo ha tocado estructuras de poder para beneficiar a todo el pueblo boliviano y evidentemente esas estructuras de poder volvieron a la gestión en noviembre de 2019 para saquear el país. No van a permitir que un gobierno democráticamente electo, un gobierno del pueblo, los enjuicie porque estamos tocando estructuras de poder que evidentemente nunca se van a quedar tranquilas.
--Ustedes hablan de un Plan Cóndor 2.0. En los '70, fue una coordinación represiva pero con predominio de las agencias de inteligencia. ¿En el golpe de 2019 hubo también intervención de los servicios de inteligencia de la región?
--Tenemos informes preliminares que muestran que han operado grupos de inteligencia de distintos países.
--¿Qué pudieron reconstruir del apoyo al golpe por parte de países de la región?
--Inicialmente lo que tenemos es que en el mes de julio de 2019, mucho antes de que se aprobara el calendario electoral en nuestro país, hubo una reunión con un funcionario del gobierno de (Donald) Trump con varios embajadores de la región, entre ellos Argentina, Brasil, Perú, la Unión Europea. Allí el personero del gobierno de Trump manifiestó que en Bolivia iba a haber un fraude electoral. Básicamente estaban siguiendo un hilo conductor y un manual que se había aprobado. Actualmente no tenemos ningún elemento trascendental que demuestre la participación de otros países en el golpe de Estado, sólo tenemos estos cables de Estados Unidos y luego tenemos la participación de Ecuador y de Argentina con la entrega de armamentos.