La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) informó este jueves que Venecia evitó ingresar a la lista de los sitios considerados "Patrimonio de la Humanidad en peligro". Según explicó el organismo, para la decisión se tuvo en cuenta la medida anunciada la semana pasada por el gobierno italiano que prohíbe el paso de grandes cruceros por los canales de la turística ciudad.
Los asesores del organismo de la ONU, quienes habían recomendado en junio que se agregara a Venecia en esa lista después de un informe anual sobre su conservación debido al exceso de turismo, dieron marcha atrás y optaron por dar un plazo a Italia hasta diciembre de 2022 para tomar medidas de preservación del ecosistema.
La decisión, explicó el Comité de la Unesco, reunido en Fuzhou (China), tuvo en consideración la prohibición impuesta la semana pasada por la gestión del primer ministro Mario Draghi, que establece que los grandes cruceros no podrán entrar ni en la cuenca, ni en el canal de San Marcos, ni el canal de la Giudecca.
"Venecia no ha sido incluida en la lista del Patrimonio de la Humanidad en peligro gracias a las decisiones del gobierno de bloquear el paso de grandes barcos frente a la plaza de San Marcos y el canal de la Giudecca. Se logró un primer e importante resultado", celebró el ministro de Cultura, Dario Franceschini.
"Ahora, la atención global sobre Venecia debe seguir siendo alta y es deber de todos trabajar para la protección de la laguna e identificar un camino de desarrollo sostenible para esta realidad única, en la que la cultura y la industria creativa están llamadas a desempeñar un papel protagonista", añadió.
Más allá de los daños ocasionados por los cruceros, el Comité de Unesco señaló que las características especiales de la icónica Venecia también se estaban deteriorando por otros factores. En este sentido, el informe del organismo mencionó el impacto del turismo masivo y advirtió sobre la disminución constante de la población. También apuntó contra las deficiencias en la gestión de la ciudad, que, según los expertos, implicó una pérdida de la autenticidad histórica de Venecia.
Este miércoles, el mítico puerto de Liverpool fue retirado de la lista del patrimonio mundial de la Unesco debido al desarrollo de proyectos inmobiliarios que van en detrimento de la autenticidad e integridad del sitio. Entre los planes de construcción más criticados se encuentra el nuevo estadio del club de fútbol Everton, que fue aprobado por el ejecutivo sin ninguna consulta pública.
Cruceros en Venecia
El pasado 13 de julio, el Gobierno de Italia anunció oficialmente que a partir del 1º de agosto los grandes cruceros tendrán prohibido navegar en los canales de Venecia.
Según precisaron las autoridades italianas en un comunicado, los barcos de más de 25.000 toneladas brutas que superen los 180 metros de largo y 35 de alto y cuyas emisiones contengan más de 0,1% de azufre, no podrán entrar ni en la cuenca, ni en el canal de San Marcos, ni el canal de la Giudecca.
Los buques con estas características tendrán que amarrar a partir de agosto en el puerto industrial de Marghera, dentro de la laguna, donde se proyecta la construcción de una infraestructura para acogerlos.
Los cruceros más pequeños (de cerca de 200 pasajeros), en cambio, podrán seguir desembarcando en el corazón de la ciudad.
Si bien los defensores del patrimonio y del medioambiente llevan años denunciando el daño que estos navíos causan al frágil ecosistema de la laguna y a los cimientos del centro histórico de la ciudad, el debate volvió al primer plano el mes pasado, con la vuelta de los cruceros tras un año de pandemia, tiempo en el que los venecianos pudieron disfrutar de mayor tranquilidad y mejor calidad de aire.