Diego Santilli se lanzó en La Plata en un acto en el que lo acompañaron todos los detractores de su candidatura bonaerense (en especial, Jorge Macri y Patricia Bullrich). También lo flanquearon Horacio Rodríguez Larreta y Elisa Carrió. El candidato de Juntos se centró en la pobreza, la desocupacion y la inseguridad y prometió "transformar la provincia". No era el discurso de un candidato a diputado, sino el de uno que va por la gobernacion bonaerense. “En la Argentina de hoy, la realidad le ganó al relato”, dijo antes de lanzar datos de pobreza. Poco después del acto, Santilli presentó su renuncia como vicejefe de Gobierno.
El encuentro fue en el Club Hípico y de Golf de City Bell, donde Santilli estaba acompañado por Larreta, Bullrich, Carrió, Jorge Macri, Miguel Angel Pichetto y Graciela Ocaña. Detrás, sentados en gradas, había otros candidatos -como Hernán Lombardi- e intendentes del PRO. El anfitrión fue el intendente de La Plata, Julio Garro. Lo siguió otro intendente, el de Lanús, Nestor Grindetti, que agradeció que lo eligieran como jefe de campaña. Cuando le tocó a Pichetto se quejó de que su espacio no esté emparentado con el trabajo: "No nos dejemos robar el discurso del trabajo. El discurso del trabajo es el de Juntos por el Cambio. Esa es nuestra bandera. Derrotar a la ideología del pobrismo".
A Ocaña le tocó intercambiar chistes con Carrió entre risas nerviosas. Hacia tiempo que no compartían un acto, luego de que Ocaña abandonara el ARI para irse a un gobierno kirchnerista. "Se cree que el hecho de que somos más pobres tiene que ver con la pandemia, pero esto no es así: tienen que ver con la mala gestión del Gobierno", dijo Ocaña.
Luego le llegó el turno a Jorge Macri, quien bajó su candidatura ante Santilli, pese a que será un contrincante en 2023 por la gobernación: "El 2019 nos dejó un desafío muy grande: un resultado del que teníamos que aprender, pero también un compromiso de unidad", afirmó. "Quiero desearle a Diego mucho éxito. Contás conmigo", le dijo. Otra detractora de su candidatura a la que le tocó hablar, Patricia Bullrich, prefirió concentrarse en atacar al oficialismo: "Tenemos enfrente a una candidata que comenzó coordinando la mesa contra el hambre, Victoria Tolosa Paz, y hoy coordina la mesa del hambre". "No queremos abandonar a la Argentina en manos del populismo y las mafias", lanzó, todavía con la esperanza de poder presentarse como candidata a presidenta en 2023.
Carrió le sumó picante a ese encuentro de viejos adversarios: "Voy a decir algo que es incorrecto políticamente. Con Pichetto estábamos en las antípodas, porque era malo Pichetto, yo les aviso". Santilli fue pasando por todas las expresiones faciales durante el discurso de Lilita, como cuando le dijo: "A Diego lo conozco de chiquito. Estuve en tu primer casamiento, pero ahora soy amigo de tu segunda esposa". La correción vino después de que Santilli le señalara que la tenían a Analía Maiorana sentada a metros de distancia. Santilli no pudo evitar sonreir cuando Carrió contó que su padre tuvo "mil novias en La Plata" o cuando comenzó a cantar el Despacito. "Los dejo con el gran candidato colorado", terminó.
"Me dejaste como un junco", dijo Larreta, a quien le tocaba hablar a continuación. El jefe de Gobierno celebró: "Por primera vez, mantuvimos a la oposición unida con el peronismo gobernando". "Quiero destacar mucho el gesto de Jorge", dijo sobre el Macri con el que tuvo que negociar por horas y horas. "Todos estamos viendo el momento difícil que se vive en la provincia. Esto de que se iba a comer asado. No se puede comprar", remarcó en lo que será uno de los ejes de la campaña de Juntos: la economia.
Santilli siguio el mismo camino. “Hoy los argentinos estamos viviendo un momento muy difícil. Un momento de oscuridad. Vivimos con angustia e incertidumbre el día a día; y vemos el futuro con desconfianza. La bronca de que todo está más caro y que el sueldo no te alcanza para llegar a fin de mes. O la de tener que cerrar el comercio por el que trabajaste toda tu vida", remarcó, no sin antes agradecer a todos los presentes y a algunos que no estaban ("Gracias Mauricio, gracias Maria Eugenia").
"La angustia de que tus hijos no están en las escuelas. El miedo de no sentirte seguro en tu casa, de salir a la calle y no saber si te puede pasar algo malo", continuó en la línea de entender y empatizar con el electorado. De hecho, sus primeros spots siguen todos los consejos de Jaime Durán Barba en torno a la cercanía con los vecinos: incluso se los ve tocándolos y escuchandolos.
"No somos un equipo que te impone, te maltrata y te echa la culpa. Somos un equipo que te escucha, que te entiende y se compromete con tu trabajo”, afirmo en sintonía con ese spot. "En la Argentina de hoy, la realidad le ganó al relato. Hoy, en nuestro país 6 de cada 10 chicos son pobres. En un año, cerraron más de 90.000 comercios y más de 40.000 Pymes, dejando a casi 200 mil argentinos y argentinas sin trabajo", remarcó el candidato de Juntos, que también dedicó tiempo a mencionar su combate contra el delito. "Tenemos que poder cambiar esta provincia", afirmó, dejando entrever el objetivo final, que es la campaña para gobernador bonaerense en 2023.
En su enumeración de los distintos sectores que conforman la provincia de Buenos Aires, mencionó varias veces a las universidades del conurbano, quizás para no tropezar con el mismo bache discursivo que tuvo Vidal hace algunos años.
Luego del acto, Santilli presentó su renuncia como vicejefe porteño para dedicarse de lleno a la campaña. "El proceso electoral que se avecina exige una dedicación de tal magnitud que puede menoscabar el ejercicio de la vicejefatura de Gobierno con que la ciudadanía me ha honrado", indico en su carta de renuncia, que es también su carta de adiós a la política porteña que transitó por varias décadas. A partir de este momento, es orgullosamente bonaerense.