Lionel Messi solicitó ayer a la FIFA que se dé por cumplida la sanción impuesta por insultar al juez asistente brasileño Emerson Augusto de Carvalho en el partido con Chile por las Eliminatorias Sudamericanas y aguardará que el máximo organismo del fútbol mundial se pronuncie “en unos días”, confirmó su abogado, Juan de Dios Crespo, que lo representó en la audiencia realizada ayer en Zurich.
Pese a que la audiencia tenía fecha desde principios de abril, el capitán de la Selección decidió no viajar a la capital de Suiza por “problemas personales” y tampoco utilizó una videconferencia, como se había especulado en los últimos días. El abogado madrileño no confirmó la forma en la cual Lio esgrimió su defensa, pero según los medios españoles, los letrados contratados por la AFA fueron los encargados de llevar un escrito.
“No voy a explicar nada de los temas que se trataron dentro de la reunión. Lo único que puedo decir es que estuvimos cuatro abogados, dos enviados por AFA, yo y un representante de mi estudio, y pedimos que le quiten toda la pena”, aclaró el español, manteniendo el hermetismo.
Lo que sí precisó Crespo fue que la FIFA “pidió que sea todo secreto”, por lo cual no se conocerán mayores detalles de lo que sucedió en la reunión.
El equipo legal esperó hasta último momento que la Pulga reviera su decisión, ya que estaban convencidos de que su presencia podía ser un factor determinante y una muestra de predisposición, hechos que ayudarían a la reducción de la pena que se le había aplicado de oficio. Por el contrario, el cinco veces consecutiva ganador del Balón de Oro se entrenó ayer a la mañana con el Barcelona para preparar el crucial partido de mañana ante Villarreal, por la Liga española.
“Expectativas no hay. Hasta que no pasen unos días no tendremos una sentencia. Hemos hecho todo lo que está a nuestro alcance y ahora debemos esperar. Simplemente hay que esperar que pasen los días”, dijo el abogado especialista en Derecho Deportivo.
Allegados a la AFA especulan con que las 3 fechas que le restan cumplir al rosarino (cumplió una contra Bolivia, derrota 2-0) podrían reducirse a dos en total, por lo que sólo le faltaría un partido, el cual sería el 31 de agosto frente a Uruguay, en Montevideo, aunque no verían con malos ojos que pueda pagar la suspensión en los próximos partidos amistosos.