La paulatina normalización de las economías de la región luego del cimbronazo de la pandemia se hace sentir en el comercio exterior. En julio, el intercambio bilateral entre Argentina y Brasil fue de 1996 millones de dólares, lo cual implica un alza interanual del un 58,1 por ciento.
El avance de la vinculación comercial se explica en primer lugar por una suba del 62,7 por ciento en las exportaciones argentinas que se dirigen hacia Brasil, mientras que las importaciones de bienes provenientes del país crecieron un 54,4 por ciento. La nota desfavorable es que el saldo comercial para Argentina arrojó un déficit de 167 millones de dólares en julio, un incremento interanual del 21 por ciento. En siete meses, el déficit comercial con Brasil acumula 562 millones de dólares, el peor registro desde 2018.
En julio, las ventas hacia el país vecino sumaron 915 millones de dólares y tuvieron el séptimo incremento consecutivo. Los mayores despachos correspondieron a autos y trigo y centeno. Argentina se posicionó en cuarto lugar entre los mayores proveedores de Brasil, detrás de China, Hong Kong y Macao (3910 millones de dólares), Estados Unidos (3145 millones) y Alemania (966 millones).
Las importaciones desde Brasil sumaron 1081 millones de dólares, con un aumento del 54,4 por ciento interanual. Se trata de la cuarta suba consecutiva. Las principales adquisiciones fueron autopartes, autos y mineral de hierro y sus concentrados. Entre los principales compradores de Brasil, Argentina se ubicó tercera, detrás de China, Hong Kong y Macao (8325 millones de dólares) y Estados Unidos (2991 millones).
En siete meses, las exportaciones argentinas a Brasil registran un avance del 43,7 por ciento, por debajo de la mejora de los envíos de Brasil a nuestro país, que tienen una suba del 57 por ciento.
Desde la consultora Abeceb analizaron que "las compras de Brasil a todos los destinos subieron un 30 por ciento interanual en los primeros siete meses del año. De esta forma, si bien las compras de bienes argentinos crecieron menos que las ventas a nuestro país, lo hicieron en mayor medida que de otros destinos. En consecuencia, la participación de los productos argentinos en el mercado brasileño creció en julio. En este mismo sentido, también lo hizo el peso de Brasil nuestras ventas. Cabe recordar que en 2020 se habían alcanzado mínimos históricos en esta materia".
La perspectiva de los envíos de mercancías a Brasil es favorable, en la medida en que estos dependen del nivel de actividad económica en el país vecino. Recientemente, el Ministerio de Economía de Brasil mejoró sus proyecciones de crecimiento, al esperar una expansión del PBI del 5,3 por ciento para este año, desde el 3,5 por ciento pronosticado anteriormente.
No obstante, el 2021 terminaría con una "profundización del déficit comercial con nuestro principal socio. Pero no esperamos que el desbalance bilateral implique un contratiempo severo, ya que será más que compensado gracias al flujo comercial positivo con otros destinos", indica Abeceb.