El diputado macrista Fernando Iglesias siguió sumando repudios por las declaraciones misóginas que le valieron un pedido de expulsión de la Cámara baja. El legislador vinculó a la actriz Florencia Peña con “fiestas sexuales” en la residencia de Olivos por haber ido a una reunión con otros actores y empresarios para hablar con el presidente Alberto Fernández de la situación del sector en medio de la pandemia. Lejos de pedir disculpas o mostrar signos de arrepentimiento, Iglesias se refugió en el silencio cómplice de la mayoría de sus socios políticos y candidatos de la alianza opositora Juntos. Ayer agradeció los mensajes del ex ministros de Cultura Pablo Avelluto y de Darío Lopérfido, quienes no solo avalaron sus dichos discriminatorios sino que denunciaron “una policía del lenguaje” y una “caza de brujas en democracia” luego de que María Eugenia Vidal saliera tímidamente a despegarse de Iglesias.
Uno de los repudios de ayer llegó del lado de la CGT: “La Confederación General del Trabajo quiere expresar su más profundo repudio por las expresiones misóginas y cargadas de violencia de género vertidas por los diputados nacionales Fernando Iglesias y Waldo Wolff durante los últimos días”, dice el comunicado del Consejo Directivo Nacional de la central obrera. “Desde la CGT –agrega– repudiamos y rechazamos esta ofensa hacia las mujeres, y llamamos a que desde la política se condene con firmeza estas actitudes y se tomen las medidas que sean necesarias para sancionar a Iglesias y Wolff, quienes con sus palabras desprestigian las bancas que ocupan en el Congreso”.
El bloque de senadores nacionales del Frente de Todos también salió al cruce de los diputados macristas: “Rechazamos y repudiamos las expresiones del diputado nacional Fernando Iglesias, por ser exteriorizaciones misóginas, machistas y porque configuran violencia de género. Nos solidarizamos con Florencia Peña, y con todas las mujeres que deben soportar el menosprecio y la infamia de parte de quienes quieren disciplinar a las mujeres, y que cuando se quedan sin argumentos recurren a lo inimaginable. Una vez más Iglesias destrata a las mujeres, las sexualiza, y pretende inhabilitar su palabra y desvalorizar su accionar”. El comunicado lleva las firmas de las autoridades del bloque, José Mayans y Anabel Fernández Sagasti. En otro texto que firmaron en conjunto todos los legisladores nacionales del oficialismo, remarcaron que las declaraciones del diputado macrista “evidencian una inconducta moral en función al cargo para el que fue elegido” y pone “en riesgo la vigencia de los consensos básicos que hacen a una sociedad democrática respetuosa de los derechos humanos”.
“Manifestamos nuestro repudio y preocupación frente a los dichos descalificatorios que afectaron a la actriz y conductora Florencia Peña, así como también, a otras mujeres, que visitaron la Quinta Presidencial de Olivos en mayo de 2020”, sostuvieron, por su parte, los diversos observatorios de violencias de género del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad; el Inadi, del Enacom y de la Defensoría del Público. “Estas expresiones dan cuenta de patrones socioculturales que reproducen desigualdad y que establecen jerarquías entre los géneros, las diversas orientaciones sexuales, identidades o expresiones de género”, agrega el comunicado.
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, consideró “adecuado” el pedido de expulsión de Iglesias de la Cámara de Diputados, que presentó la diputada Gabriela Cerruti junto a otras 14 compañeras de bancada del Frente de Todos “por la violencia misógina y machista, verbal y psicológica que ejerce sistemáticamente contra las mujeres”. “Eso debería encontrar un cauce y ver qué tipo de comportamiento es el que corresponde en caso de un diputado. Eso deberá ser evaluado”, afirmó Cafiero. “El daño que van haciendo es inconmensurable y nadie pide disculpas”, aseguró el ministro y agregó: “Es muy canallesca la situación que se está viviendo”.
En Juntos
En tanto, apenas unos escasos socios políticos de Iglesias y Wolff buscaron desmarcarse de sus dichos misóginos.
María Eugenia Vidal tuvo que recular sobre sus pasos. Después de haber dicho que se sentía “orgullosa” de la lista que la acompaña en la Ciudad (entre ellos Iglesias) y de “compartir los valores” que representan, se vio obligada a recapacitar y sostuvo que “como mujer” no podía “acompañar esa manera de expresarse”.
De todas maneras, Iglesias celebró los tuits de exministros macristas que salieron a respaldarlo e incluso criticaron a Vidal por desmarcarse. “La policía del lenguaje es uno de los mayores horrores del presente. Sus patrullas exasperadas denunciando lo que dijo tal o cual en nombre de la moral y la corrección política son más caza de brujas que democracia. Mi solidaridad con dos amigos: Waldo Wolff y Fer Iglesias”, publicó Pablo Avelluto en redes sociales. Darío Lopérfido, en tanto, citó la declaración en la que Vidal dice que como mujer no puede acompañar los dichos de Iglesias y dijo que esa era una muestra de la “policía del lenguaje”. Sin nombrar a Vidal, Iglesias agradeció el apoyo de sus dos compañeros.
La Comisión de Mujeres del PRO, por su parte, rechazó “el uso de comentarios sexistas y denigrantes” y pidió con un comunicado, a los miembros de su espacio, sin hacer nombres, que “erradiquen esas prácticas”.