Su arribo a Barcelona y el contrato en una servilleta
En septiembre de 2000, luego de cinco años en las inferiores de La Lepra y una prueba en el Millonario, decidió partir con su papá Jorge hacia la ciudad de Condal en busca de crecimiento en todo sentido: futbolístico y físico, ya que allí le pagaron el tratamiento hormonal que necesitaba. Una breve prueba alcanzó y sobró para demostrar condiciones. El 14 de diciembre, bajo amenaza de irse a otro club, entre ellos Real Madrid, el entonces Secretario Técnico Carles Rexach, el allegado Horacio Gaggioli y el pequeño Leo firmaron un contrato simbólico e improvisado que cambió la historia del club para siempre. ¿Dónde? En una servilleta.
Su debut y el primer grito en el equipo mayor bajo la protección de Ronaldinho
El 16 de octubre de 2004, ante una gran cantidad de lesiones en el plantel de Primera División y luego de haber demostrado ser un verdadero crack en las inferiores con 105 tantos en 107 partidos, entró con 17 años en lugar de Deco en el tramo final de un derbi contra Espanyol. Al final de esa misma temporada, el 1º mayo de 2005 ante Albacete por La Liga, recibió de Ronaldinho y definió por arriba del arquero. Primero se lo anularon por offside, pero apenas unos minutos después repitieron fórmula para sellar el 2-0 con el primero de sus 634 goles. El brasileño lo alzó y lo paseó para que el Camp Nou entero le regale su primera ovación.
El gol Maradoniano que significó su explosión mediática
El 18 de abril de 2007, Barcelona recibió a Getafe en Camp Nou por la ida de la semifinal de la Copa del Rey. Messi fue el autor de dos de los cinco goles en la victoria 5-2 de los Culés. El primero de ellos fue a los 29 minutos del primer tiempo, cuando agarró la pelota sobre la banda derecha y emuló a Diego Armando Maradona contra Inlgaterra en el Mundial de México de 1986. El mundo, que ya conocía al joven argentino, desde ese día no paró de hablar de él. En marzo de 2019, ese tanto fue elegido como el mejor de toda la historia del Barça.
Un hat-trick de antología al Real Madrid
El 10 de marzo de 2007, con apenas 19 años, Messi jugaba su tercer clásico contra el Merengue, y le marcó el primero de los 26 goles que le anotó. Pero también el segundo y el tercero. Fue empate 3-3 con tres de la Pulga. Dos veces le metió tripletes al equipo de la Casa Blanca, además de cinco dobletes.
El sextete, marca de un equipo que dejó su huella
El 2009 fue el mejor año de la historia de Barcelona, donde consiguió un hito único para un club a nivel mundial. Los dirigidos por Pep Guardiola ganaron absolutamente todo lo que jugó: La Liga, Copa del Rey, Champions League, Supercopa de España, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes. Todo con Lionel Messi como gran figura y goleador de un equipo que revolucionó la manera de jugar al fútbol.
Un cabezazo a la gloria, su gol favorito
El 27 de mayo de 2009, Barcelona derrotó 2-0 a Manchester United en el estadio Olímpico de Roma en la final de la Champions League. Leo, que ya había ganado el trofeo continental en 2006 pero con poca participación en el primer equipo, fue figura ante los Diablos Rojos. En el complemento, Xavi Hernández lo vio picando hacia el área y metió el centro al segundo palo. Leo se elevó, se mantuvo en el aire y la cruzó con la cabeza al segundo palo de Edwin Van der Sar. Años más tarde, lo eligió como su gol favorito, aún por sobre las apliadas contra Getafe, Real Madrid o Athletic Bilbao.
Un goleador imparable
Sin ser centrodelantero, Messi se ubicó rápidamente como el gran goleador del mundo. Pep Guardiola supo explotar su faceta de definidor, que alcanzó su punto más alto en 2012, con 91 goles a lo largo del año, 18 en la Selección Argentina y 73 en Barcelona en 60 partidos, un promedio de 1.22 tantos por juego. Desde el 2009 hasta el día de hoy, nunca quedó por debajo de los 30 goles por temporada. Es el máximo goleador histórico del club más de 400 goles más que César Rodríguez, el segundo. También es el máximo artillero en La Liga de España. 731 partidos, 634 goles. Promedio de 0.86 por partido.
El gran golpe en el Santiago Bernabéu
Uno de los días más recordados para Messi fue el 17 de agosto de 2011. El clásico ante Real Madrid más importante fue en la semifinal de la Champions League de aquel año. La ida fue en la capital española, en el Santiago Bernabéu, donde La Pulga brilló como nunca. Cuando quedaban 15 minutos para el final del partido, con el resultado igualado sin goles, el astro argentino abrió el marcador tras un centro de Ibrahim Afellay. Sin embargo, dejó a todos los madridistas de pie cuando agarró una pelota en tres cuartos de cancha que le dejó Sergio Busquets y esquivó como conos a todo los futbolistas vestidos de blanco que tenía enfrente y definió cruzado ante Iker Casillas. Finalmente avanzó de ronda y fue campeón de la Liga de Campeones ante Manchester United, con gol incluido en el triunfo 3-1.
La gloria de Berlín y la MSN
Luego de la frustración tras la derrota en la final del Mundial de Brasil en 2014 con la Selección Argentina, Messi arrancó otra temporada histórica. Con la llegada de Luis Suárez y ya con Neymar en el equipo, formaron un tridente de ataque que se conoció como MSN por sus iniciales. Lograron una vez más la triple corona. En la Champions League logró el triunfo 3-1 sobre Juventus en la final de Berlin con Luis Enrique como entrenador. La última Champions en su palmarés. Para colmo, en la final de la Copa del Rey anotó un gol ante Athletic Bilbao donde, a pura gambeta, se metió en la nómina para ganar el premio Puskas.
Capitán, amo y señor
En 2014, Carles Puyol anunció su retiro del fútbol profesional y soló la cinta de capitán de Barcelona tras 10 años. El heredero fue Xavi Hernández, que jugó una temporada y se fue al fútbol de Qatar, por lo que el mando lo tomó Andrés Iniesta. Durante tres años, el cerebro llevó la cinta hasta que emigró al fútbol de Japón en 2018. Desde ese día, Lionel Messi comenzó a ser el capitán del Barça.
El sexto Balón de Oro y sus 700 goles
La última temporada de Barcelona estuvo lejos de ser la mejor. No ganó ni un título y, para colmo, fue humillado por Bayern Múnich en los cuartos de final de la Champions League con un contundente 8-2. Acorde con el rendimiento de su equipo, tampoco fue la mejor temporada para Lionel Messi. Fue en la que menos goles hizo desde 2008 con ‘apenas’ 30 gritos, pero igualmente dio que hablar. A fines de 2009 ganó el Balón de Oro, por sexta vez en su carrera, hito único para un futbolista. Además, había sido galardonado en 2009, 2010, 2011, 2012 y 2015. Además, frente a Atlético Madrid convirtió su gol número 700 en su carrera, 70 de ellos con la Selección Argentina, donde también es el máximo artillero.
El jugador con más presencias en la historia del Barcelona
El 21 de marzo de 2021, la Pulga jugó el partido número 768 de su vida con la camiseta Culé y superó a Xavi, que era el hombre récord en partidos jugados.