Con el objetivo de “recuperar el pasado desde el futuro”, un grupo de trabajadores y trabajadoras que integran el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) junto a docentes y estudiantes de la carrera de Periodismo de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV) abrieron una investigación sobre periodistas, comunicadores, trabajadores de prensa, hombres y mujeres militantes que llevaron a cabo tareas vinculadas al oficio de informar y que fueron víctimas del terrorismo de Estado que está en plena construcción. El trabajo sobre la memoria relativa al sector es un objetivo y también una herramienta para construir un camino: “En la reivindicación, el recuerdo y el conocimiento de aquellos que hoy no están está la huella que tenemos los y las trabajadores de prensa para saber por dónde caminar y dónde ”, señaló Diego Pietrafesa, miembro de la Secretaría de Derechos Humanos del sindicato y uno de los integrantes del colectivo al frente del proyecto.
El primer antecedente que encuentra este archivo web de “trabajadorxs de prensa desaparecidxs y asesinadxs por el terrorismo de Estado”, como lo llaman en el SiPreBA, es un compendio de casos de periodistas desaparecidos durante el último golpe cívico militar eclesiástico publicado en 1986 por la Asociación de Periodistas de Buenos Aires bajo el título “Con vida los queremos. Las voces que necesitaba silenciar la dictadura”.
El trabajo fue reeditado al año siguiente por la entonces flamante Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires. En 2016, la Secretaría de Derechos Humanos divulgó un listado ampliado que amplió el período histórico de búsqueda hasta la dictadura de Juan Carlos Onganía, incluyendo el accionar de la Triple A.
“Hacía falta un trabajo más completo y justo sobre nuestros compañeros y compañeras que permitiera un abordaje integral de sus historias de vida, no solo de sus trabajos, sino que también tuviera en cuenta sus militancias, sus filiaciones políticas”, indicó Pietrafesa, uno entre la veintena de miembros activos del sindicato que se involucró en tomar aquellos puntapies y ampliarlos. La suma de aquellas facetas, descubrieron, “reveló el compromiso social indiscutible de todos ellos y ellas”, completó.
El caso de Rodolfo Walsh es paradigmático porque “tiene de todo” y porque además es conocido: sobre él hay mucha información. Pero no es la generalidad. El proyecto ofrece una base con datos breves (nombre, lugar y fecha de nacimiento, lugar de trabajo o de formación, cuándo y dónde fue secuestrade y/o asesinade, organización de militancia); foto, si se cuenta con ella; datos sobre causas judiciales que investiguen los crímenes en su contra, si existen de 243 trabajadores y trabajadoras de prensa. En muy pocos casos hay más material: obra periodística, algún video con testimonio. Todo eso está en investigación y producción. La idea es recoger lo que haya y, si no está, buscar la manera de producirlo a través de entrevistas con familiares, colegas, compañeres de militancia. La iniciativa está en pleno crecimiento y es abierta: quien tenga datos para aportar puede hacerlo a las direcciones y contactos que figuran en el sitio web.
En esa faena están compenetrados, además de les integrantes del sindicato, docentes y estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNDAV, especialmente de la Carrera de Periodismo en una alianza que desde el sindicato definen como “intencional”: “Queríamos encarar la búsqueda y la construcción de la memoria desde el futuro”, aportó el periodista. Les alumnes se suman a la iniciativalo podrán hacer a modo de prácticas profesionales, coordinados por Claudia Montesino.
Santiago Albarracín es director de la carrera de Periodismo en la casa de altos estudios de Avellaneda y evalúa desde esa posición el valor de la investigación en permanente desarrollo para quienes ejercerán el oficio en el futuro pronto. “Conocer las historias de los y las periodistas desaparecidos nos permite entender que el ejercicio del periodismo no ha sido ni será un accionar que se desarrolle en un territorio calmo”, señaló, por lo que “la carrera puede enseñar métodos y técnicas para el oficio pero sin abordar el contexto no hay posibilidad de desarrollar una mirada crítica y un compromiso en la acción que habilite una transformación de las prácticas”.
En ese sentido, la participación en un proyecto como el del archivo web sobre trabajadorxs desaparecidxs “emparenta” a docentes y estudiantes “con un conjunto de discusiones que no suele tener lugar en los compartimentos estancos de las materias. Y eso es una deuda” de la universidad con la comunidad, propuso. Junto con la construcción de memoria relativa al oficio, la constitución y autopercepción de les periodistas en tanto trabajadores “es lo más valioso que la UNDAV obtiene” de su participación en el proyecto.