La policía británica prometió volver a examinar las acusaciones contra el príncipe Andrés, tras las denuncias de una mujer estadounidense que afirma haber sido abusada por él a través de la red del pederasta y magnate financiero Jeffrey Epstein, sobre quien se informó que hace dos años se suicidó en prisión.
Virginia Roberts Giuffre, ahora de 38 años, afirma que el segundo hijo de la reina Isabel II es "uno de los hombres poderosos" a quien fue "entregada con fines sexuales".
Los hechos ocurrieron entre 2000 y 2002, cuando la denunciante tenía 16 años, y se hicieron mediante la extensa red de tráfico sexual por la que Epstein fue encarcelado.
"Pedí a mi equipo que revise de nuevo los documentos", señaló a la emisora británica LBC la jefa de la policía de Londres, Cressida Dick, quien precisó que los cargos ya habían sido investigados dos veces en cooperación con la Fiscalía.
"Por supuesto que estamos dispuestos a trabajar con las autoridades extranjeras, les aportaremos toda la asistencia solicitada en el marco de la ley", agregó Dick, quien dijo que "nadie está por encima de la ley", según recogió la agencia de noticias AFP.
El príncipe Andrés, que ya había rechazado estas acusaciones, está sindicado de haber "agredido sexualmente" a Roberts, entonces menor de edad, en tres ocasiones: en Londres, en casa de una persona cercana a Epstein, Ghislaine Maxwell; en la propiedad de un empresario de Nueva York y en las Islas Vírgenes.
Los servicios del príncipe Andrés rechazaron hacer comentarios. Pero la familia real, que se había mantenido en silencio, ahora, según publicó este jueves el diario "The Times", sin ofrecer un comentario oficial, dio a entender sus dudas respecto a que Andrés regrese a la vida pública tras las acusaciones de abuso.
Como suele suceder, la versión no oficial trascendió a través de "fuentes cercanas" al príncipe Carlos, heredero de la corona británica, que sugirió que la denuncia "probablemente reforzará la opinión (del heredero al trono) de que el regreso del duque es imposible".
El duque de York, de 61 años, ya había negado "categóricamente" los cargos de la denuncia en una entrevista con la BBC en noviembre de 2019, en la que no expresaba ningún arrepentimiento por su amistad con Epstein ni la más mínima empatía por sus víctimas. Pese a sus desmentidos, el hecho de que hubiera frecuentado al financista estadounidense lo obligó a retirarse de la vida pública, aunque continúa apareciendo en público junto a la familia real.
El príncipe Carlos, heredero de la corona británica, no ve posibilidad de que su hermano Andrés, duque de York, regrese a la vida pública tras las acusaciones de abuso sexual que una mujer presentó contra él en EE.UU., informa este jueves el diario "The Times".
La misma fuente sostuvo que incluso si la demanda presentada por Roberts fracasa, es un "recordatorio" del riesgo que suponen los vínculos de Andrés y el empresario Jeffrey Epstein para la reputación de la familia real. Epstein fue condenado en EE.UU. por abusos sexuales antes de suicidarse en 2019.
Roberts presentó una demanda civil en un tribunal federal de Nueva York. En ella acusaba al hijo de la reina Isabel II de Inglaterra de "agredirla sexualmente" cuando tenía 17 años, tras ser presionada por Epstein para que tuviese relaciones sexuales con el duque de York.
En estos momentos, el príncipe Andrés está en el Castillo de Balmoral (Escocia) acompañado de la Reina y su exesposa, Sarah Ferguson, mientras preparan la defensa contra la demanda con sus abogados estadounidenses.