La Cámara Federal porteña confirmó este jueves el procesamiento de un hombre acusado de amenazar a través de las redes sociales a Tani Fernández, hije del presidente Alberto Fernández.
Así lo resolvió la sala I del Tribunal de Apelaciones en una resolución en la que, además revocó la prisión preventiva del acusado y le redujo a 500.000 pesos el embargo impuesto por el juez Sebastián Casanello, que antes era de dos millones de pesos, según consignó Télam.
De este modo, el hombre (que vive en La Pampa) quedó procesado y será enviado a juicio oral por "amenazas anónimas, en cinco hechos" contra Tani Fernández y un amigo. El acusado estaba con prisión domiciliaria, pero los camaristas Mariano Llorens, Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia le concedieron la excarcelación. Entendieron que no había riesgo de que se fugara ni que entorpeciera la causa.
La Cámara dio por probado que el acusado "en un lapso de tiempo sostenido" amenazó en redes sociales a Fernández y a un amigo en varias oportunidades. Entre las amenazas más fuertes les había dicho que serían "cargados en un Falcon verde" (en referencia a los autos usados para desaparecer personas durante la dictadura cívico militar, que "los iban a torturar" y que les iban a "cortar la cabeza", a "quemar vivos" y "tirarlos en un basural". Esos mensajes fueron recibidos por Fernández y su amigo en sus redes sociales, desde distintas cuantas de Instagram con las que el agresor "intentó ocultar su identidad".
En la investigación se comprobó que esas cuentas estaban asociadas a un mismo perfil y que su creación provenía de una dirección de IP de una localidad pampeana, en la que vive el imputado. Cuando le secuestraron el teléfono celular, los investigadores hallaron "guardadas numerosas imágenes" de ambas víctimas.
Si bien el hombre admitió haber enviado las amenazas, sus abogados argumentaron que eran "expresiones de deseo de imposible realización" y por ello pidieron que le revoquen el procesamiento. Este pedido no fue admitido por los camaristas, que entendieron que "las circunstancias de modo, tiempo y lugar en las que se desarrollaron los hechos, a la par de los elementos de prueba colectados, resultan suficientes y contundentes para mantener en esta instancia la decisión del magistrado en cuanto dictó el procesamiento" del acusado. Las amenazas ocurrieron desde junio de 2020 al 13 de julio de 2021, mediante diferentes usuarios en las redes sociales y un correo electrónico.