Un terremoto de magnitud 7,2 sacudió Haití el sábado por la mañana, causando al menos 227 muertos y daños en este país caribeño que aún se no recupera del devastador sismo de 2010 y que padece una crisis política y social en medio de la pandemia de Covid-19.
El sismo, que hizo temblar las casas y obligó a la población a buscar protección, se produjo hacia las 8.30 locales (9.30 hora argentina) y tuvo su epicentro a 12 km de la ciudad de Saint-Louis-du-Sud, que se ubica a unos 160 kilómetros de la poblada capital haitiana, Puerto Príncipe, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Esta institución estadounidense emitió una alerta de tsunami, previendo posibles olas de hasta tres metros a lo largo de la costa de Haití, pero pronto la levantó.
"Muchas casas están destruidas, hay muertos y algunos están en el hospital", dijo a la agencia de noticias AFP Christella Saint Hilaire, quien vive cerca del epicentro. Y agregó: "Todo el mundo está ahora en la calle y las réplicas siguen produciéndose".
Dónde golpeó con más fuerza el terremoto de Haití
La larga sacudida inicial se sintió en gran parte del Caribe , incluso en Santiago de Cuba (a unos 300 km de Saint-Louis-du-Sud), donde muchos residentes salieron de sus hogares, según Radio Rebelde.
El sismo dañó escuelas y viviendas en la península suroeste de Haití, según las imágenes publicadas en redes sociales por los testigos.
Los residentes compartieron imágenes en las redes sociales de las ruinas de edificios de hormigón, incluida una iglesia en la que aparentemente se estaba celebrando una ceremonia el sábado en la ciudad suroeste de Les Anglais.2
En enero de 2010 hubo un sismo similar que afectó gran parte de Puerto Príncipe y las ciudades cercanas, cuyas consecuencias fueron la muerte de más de 200 mil personas y 300 mil heridos.
Entonces, más de un millón y medio de haitianos se quedaron sin hogar, dejando a las autoridades de la isla y a la comunidad humanitaria internacional ante un reto colosal en un país que carece de un registro de tierras y de códigos de construcción.
El terremoto destruyó cientos de miles de viviendas, al igual que edificios administrativos y escuelas, así como el 60 por ciento del sistema sanitario de Haití.
La reconstrucción del principal hospital del país sigue incompleta, y las organizaciones no gubernamentales se han esforzado por suplir las numerosas deficiencias del Estado.