El número de muertes que dejó el terremoto de magnitud 7,2 registrado este sábado en Haití aumentó a 724, según el último registro de Protección Civil de ese país.
Las autoridades haitianas en el anterior reporte habían confirmado 77 decesos más y el el número de víctimas había ascendido a 227.
El informe de este domingo a la mañana agrega que hay más de mil heridos y los hospitales del país se encuentran desbordados.
"Registramos 160 muertos en el sur, 42 en Nippes, 100 en Grand'Anse y dos en el noroeste", dijo Jerry Chandler, director de protección civil en una rueda de prensa.
"Las primeras intervenciones, llevadas a cabo tanto por rescatistas profesionales como por miembros de la población, hicieron posible extraer a muchas personas de entre los escombros", lamentó Protección Civil en su cuenta de Twitter, donde explicó que "los hospitales siguen recibiendo heridos". Al menos tres centros de salud en las localidades de Pestel, Corailles y Roseaux estaban totalmente saturados de pacientes, según Chandler.
Christella Saint Hilaire, que vive cerca del epicentro, dijo que "muchas casas están destruidas" y que "las réplicas siguen produciéndose". Por su parte, Job Joseph, residente en la ciudad de Jeremie, al extremo occidente de la Haití aseguró que “las casas y los muros que las rodean se han derrumbado. El tejado de la catedral se derrumbó".
El terremoto de este sábado, que también se sintió en la República Dominicana, se registró a las 08.29 hora local, a unos 12 kilómetros de la localidad de Saint-Louis du Sud, con un epicentro de 10 kilómetros de profundidad. A este siguió una réplica de magnitud 5,2 a 17 kilómetros de la localidad de Chantal, también con el epicentro de 10 kilómetros de profundidad.
El impactante sismo también se sintió en gran parte del Caribe, incluso en Santiago de Cuba (a unos 300 km de Saint-Louis-du-Sud), donde muchos residentes salieron de sus hogares, según consignó Radio Rebelde. El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) emitió inicialmente una alerta de tsunami, previendo posibles olas de hasta tres metros a lo largo de la costa de Haití, pero poco después la levantó.
Estado de emergencia
Por la gravedad de lo ocurrido, el Gobierno local decidió declarar el estado de emergencia durante un mes, según anunció el primer ministro de Haití, Ariel Henry, quien asumió el cargo el pasado 20 de julio, 13 días después del asesinato del presidente Jovenel Moise. Henry pidió "mostrar solidaridad" y no entrar en pánico, el primer ministro también se trasladó a las zonas afectadas.
"Los primeros detalles de información nos hacen creer que hay varios heridos, que hay muchos muertos y casas derrumbadas. Ahora hay mucha gente bajo los escombros. Especialmente en hoteles y lugares de culto", señaló Henry.
Los habitantes compartieron imágenes en redes sociales donde se ven los esfuerzos por sacar a personas de los escombros. Los daños en la ciudad de Les Cayes parecen ser importantes, incluyendo el derrumbe de un hotel de varios pisos. También circularon imágenes de las ruinas de edificios de hormigón, incluida una iglesia en la que aparentemente se estaba celebrando una ceremonia el sábado en la ciudad suroccidental de Les Anglais.