La ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, viajó esta mañana rumbo a Rusia donde mantendrá reuniones con representantes del Instituto Gamaleya para supervisar la marcha de los acuerdos firmados para la compra de Sputnik V y analizar resultados de los estudios para el uso pediátrico de esa vacuna contra la covid-19.
La titular de la cartera sanitaria partió hacia Moscú junto con la asesora presidencial Cecilia Nicolini, con quien durante los últimos meses encabezó las gestiones y negociaciones con los distintos laboratorios proveedores de vacunas que protegen al organismo de los efectos del coronavirus.
El objetivo del viaje de ambas funcionarias es profundizar el trabajo colaborativo en relación a la producción y provisión de vacunas contra la covid-19, consignaron fuentes oficiales a Télam.
La tarea de Vizzotti y Nicolini durante sus días en Rusia será compartir los resultados de los estudios de intercambiabilidad hechos entre ambos países, producto del acuerdo para el envío de vacunas y la posterior elaboración en la Argentina de los dos componentes de ese fármaco que tiene un 96,7 por ciento de efectividad contra el coronavirus.
En busca de otra vacuna para niñes y adolescentes
También se revisarán los cronogramas de entregas de las próximas dosis que llegarán al país y del componente activo que se enviará para su posterior y que es la materia prima para la elaboración acordada con el Laboratorio Richmond.
Pero las expectativas están centradas en el estudio de los avances de la investigación de vacunación en adolescentes y pediatría que llevan adelante en ese país. Sputnik es una de las vacunas que más se distribuyó en la Argentina y la posibilidad de que se apruebe su utilización con menores de 18 años haría que la Argentina mejore sus posibilidades de ampliar el espectro de vacunación a adolescentes y niños.
La agenda con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) incluye también repasar el cronograma de entrega de vacunas, particularmente del componente 2, cuya entrega es la que sufrió más demora.
La semana pasada, la Argentina recibió casi un millón y medio de dosis de Sputnik V, 150 mil de las cuales fueron segundas dosis terminadas en el Richmond. Este laboratorio ya tiene 2.195.000 dosis 2 terminadas, una cifra enorme que iría cerrando el problema de las faltantes de ese componente.