Desde este lunes, Francia exige el certificado sanitario para ingresar a los 126 centros comerciales de más de 20.000 metros cuadrados que existen en el país, ubicados principalmente en la región parisina y en el sur de Francia, donde hay un riesgo alto de contagio.
Este documento, que ya es obligatorio en restaurantes, bares, museos, cines, viajes en trenes de larga distancia y vuelos domésticos, consiste en un certificado de vacunación completo, un test negativo de coronavirus de menos de 72 horas o un certificado de recuperación de menos de seis meses.
El pase sanitario, pensado para incentivar la vacunación, proteger a la población y evitar nuevos confinamientos, es resistido por un sector de la población que este sábado volvió a manifestarse por quinta semana consecutiva en varias ciudades de Francia, ya que considera que se trata de un abuso de poder que restringe las libertades esenciales, divide y segrega.
Hasta la fecha, según las cifras oficiales, solo el 60% de la población francesa ha recibido el esquema completo de inmunización.
Mientras tanto, Francia enfrenta un repunte en el número de pacientes internados en cuidados intensivos por coronavirus, que subió este domingo a 1.852 (15 más que el sábado). El aumento también se registró en las hospitalizaciones por covid en salas generales, que crecieron de 9.648 a 9.789.