La ocupación de los talibanes en Kabul sacudió el tablero geopolítico mundial. Miles de personas intentan escapar de la capital afgana en medio del caos y los derechos de las mujeres vuelven a estar en claro riesgo ante la vuelta al poder de la fuerza insurgente.
Ese es el contexto que se vive en Afganistán desde hace 24 horas, al que se le añade que Estados Unidos reafirmó su retirada de Kabul. Es que este lunes Joe Biden confirmó el "fin de la presencia estadounidense en Afganistán" y a la vez que que sugirió que a las autoridades locales -financiada durante décadas por EE.UU- les había faltado la voluntad de enfrentarse a los talibanes."Les dimos todas las oportunidades para determinar su propio futuro", apuntó en conferencia de prensa.
Pero, además las imágenes de deseperación por la caída del gobierno de Ashraf Ghani, también circularon otros videos en los cuales queda evidenciado el contraste entre la fuerza insurgente y las actividades cotidianas que se registraban en Afganistán. Ese es el caso de una grabación casera que muestra a talibanes armados en un actitud infantil, jugando con autitos chocadores en un parque de diversiones.
Según informaron cronistas que cubren la guerra en Afganistán, esas imágenes corresponden a la toma del poder en la provincia de Herat, días antes de la llegada a Kabul. En otro de los videos, los guerrilleros aparecen jugando en una suerte de carrousel.
Palacio presidencial y TV Pública
Este domingo, a través de las redes sociales, se difundieron imágenes de combatientes talibanes que clamaban "victoria" dentro del palacio presidencial, en Kabul. Las fotos dieron vuelta el mundo: la milicia entró al edificio y recorrió los principales salones, entre ellos, el despacho del expresidente Ashraf Ghani Ahmadzai, quien huyó del país para supuestamente "evitar un baño de sangre".
Veinticuatro horas después se sigue difundiendo material del arribo a la residencia oficial, por caso, un video donde los propios talibanes prueban el gimnasio del palacio presidencial, con varios ejercicios físicos. La irrupción de los talibanes también se observó en el canal público, que fue intervenido por los guerilleros, quienes dieron un extraño discurso de apertura sin mirar a cámara.