Con muchas y notorias ausencias, la mesa nacional de Juntos por el Cambio se volvió a reunir de forma virtual, ya con Mauricio Macri en la Argentina. El ex presidente tomó la iniciativa, exigió más fiscales en territorio bonaerense y elogió el segundo lugar que consiguió su espacio en Salta. Intentó mostrarse más activo frente a un público escaso: no lo escuchaban ni el jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, ni la ex gobernadora María Eugenia Vidal. Las fotos de reuniones sociales en Olivos no se tocaron en el encuentro, dado que presentan un conflicto interno dentro de Juntos por el Cambio: Elisa Carrió ya dijo que no acompañará un juicio político al presidente Alberto Fernández. En busca de pacificar los ánimos dentro de la alianza opositora, el tema quedó fuera de la agenda del encuentro.
Tal vez haya sido la reunión con más ausencias en lo que va del año. Algunas figuras faltaron porque están abocadas a la campaña. Otras directamente se olvidaron del encuentro, que se hizo temprano a la mañana un feriado (lo que indica que no sería el lugar donde se está cortando el bacalao). Macri cumplió esta vez puntualmente con conectarse a la reunión virtual pero se encontró con que ni Larreta, ni Vidal, ni el radical Mario Negri, ni el senador Martín Lousteau; ni el jefe de bloque del PRO en Diputados, Cristian Ritondo; ni el auditor Miguel Angel Pichetto se pensaban sumar. Este último calificó de "imbécil" la campaña que viene haciendo Juntos por el Cambio.
Con esas ausencias, muchas justificadas por la campaña, el encuentro transcurrió entre Macri, Patricia Bullrich y Humberto Schiavoni por el PRO; Alfredo Cornejo y Luis Naidenoff, por la UCR; y por la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, Juan Manuel López y Maricel Etchecoin.
El tema que más los había ocupado en la agenda pública --la foto del cumpleaños de Fabiola Yañez-- no formó parte de los temas de conversación. ¿El motivo? Que, lejos de unificar a todo el espacio opositor, la idea de avanzar con un juicio político contra el presidente Alberto Fernández generó un nuevo foco de conflicto dentro de Juntos por el Cambio. La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, cuestionó la estrategia, que interpretó como una movida que terminaría fortaleciendo a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. “No tenemos que ser
funcionales al enojo de Cristina para que después de la derrota
electoral lo culpe, lo haga renunciar y ella asuma la
Presidencia, porque ahí sí vamos a estar en Rusia y en Venezuela; yo
prefiero que no gobierne Cristina Kirchner”, fue la argumentación que ofreció Carrió. Desde el ala dura del PRO le respondieron que "Cristina ya gobierna" y por eso hay que seguir intentando removerlos.
Por eso, la Coalición Cívica no acompañará el pedido de juicio político al Presidente que presentaron Ritondo por el PRO y Negri por la UCR, junto a otros trece diputados “por mal desempeño y por la eventual comisión del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público”. En el PRO le bajaron el tono a esta diferencia: advirtieron que carece de importancia, ya que es imposible llegar a los dos tercios necesarios para habilitar el juicio político (grosso modo, están a 54 diputados de distancia).
También destacaron que la Coalición Cívica sí acompañó otro proyecto para crear una comisión investigadora del Congreso sobre las visitas a Olivos en 2020. La iniciativa, por supuesto, no se exitiende a las visitas de jueces y fiscales en años previos.
En este estado de situación interno, el tema del cumpleaños de Yáñez y el juicio político pasó de largo en la mesa nacional de Juntos por el Cambio. Sí le dedicaron tiempo a analizar la elección en Salta, donde los candidatos locales del espacio opositor quedaron en segundo lugar, lo que los dejó "muy conformes".
Ávido de protagonismo, Macri estuvo muy insistente con la fiscalización en las elecciones, en especial en la provincia de Buenos Aires, donde ya empezó a agitar el fantasma del fraude. El ex presidente siempre reclama que se defiendan más sus cuatro años de gobierno y esta no fue la excepción: reclamó que se salga a responder a las críticas del Gobierno al endeudamiento con el FMI que dejó su gestión. Finalmente, acordaron armar un documento para responder al tema de la deuda y contestar con otros indicadores que, según Macri, demuestran que su gobierno fue mejor que el actual. La idea que busca instalar Macri es la que expresó su secretario privado, Darío Nieto, investigado por espionaje y ahora candidato a legislador porteño: "No hay una persona en la Argentina que te diga que hace tres años estaba peor que ahora".
Macri no se va a limitar a dar instrucciones en reuniones con pocos asistentes. El ex presidente piensa tener una agenda muy activa en campaña. Si bien todavía no tiene fechas, se sabe que visitará Santa Fe para respaldar a su candidato Federico Angelici, en una de las cuatro listas de JxC que se presentan. Dato curioso: en las otras tres también hay dirigentes del PRO. No se sabe cómo tomarán la participación de Macri.