Cuatro periodistas que en su momento renegaban de la política fueron los ganadores de esta elección legislativa provincial. Emiliano Durand, que se llevó la senaduría por la capital, fue quien arrasó en las urnas. Y aunque Martín Grande, actual diputado nacional, ya hizo pie en la política, fiel al estilo de Juntos por el Cambio, sigue pregonando la antipolítica. Ese candidato, si bien quedó segundo en la contienda, fue una de las sorpresas de las elecciones.

Por último, con su espíritu bonachón y descuidado, más dispuesto a los chistes que a pensar e idear políticas públicas, pero con una muy buena llegada, Victor "Vitín" Lamberto le ganó a todos en la disputa por copar la Cámara Baja. El periodista de Canal 11 llevó a la concejalía de la ciudad a su compinche en el canal y en Prensa de la Gobernación, el periodista deportivo Guillermo Kripper, que terminó segundo por detrás del actual concejal José Gauffín.

El resultado, a su vez, desnuda una realidad en la política salteña que ya se viene manifestando desde las elecciones de 2019, cuando ingresaron también a través del espacio del actual gobernador, concejales y diputados ousiders que no venían de la política pero que eran conocidos por cumplir otros oficios, como músicos, profesoras de fitness, periodistas, y hasta traumatólogas amigas de algún otro candidato, demostrando el declive en el imaginario colectivo de quienes toda su vida se dedicaron a hacer política.

Quizá como un signo de época que saben explotar desde ciertos sectores, denostando la política mientras la hacen, pero también por los sucesivos errores de quienes hasta aquí la ejercieron, la composición de la Legislatura y el concejo capitalino de a poco se fue llenando de personajes populares pero sin trayectoria en la militancia y en la vida partidaria.

Los nombres de quienes quedaron afuera son elocuentes. Y si bien el gobernador festejó el triunfo el domingo por la noche, no debe dejar de preocuparle que en la interna entre sus dos frentes, ganó el que menos referentes de su espacio incluía y marcó un desgaste en las figuras de su gabinete.

El gran ganador fue Unidos por Salta, que además fue un espacio compartido por quien lleva las riendas de la ciudad de Salta, Bettina Romero, que se adjudicó rápidamente el triunfo de Emiliano Durand. Ese mismo frente lo integraba el ganador en diputados Vitín Lamberto y el segundo en el Concejo, Guillermo Kripper.

Mientras que el Frente que lleva las siglas de Gustavo Sáenz, Gana Salta, que incluía al Partido Justicialista y a los funcionarios de su riñón, quedó muy lejos de sus expectativas. Y así lo hizo saber en sus redes sociales su principal candidato, el secretario General de la Gobernación, Matías Posadas, que terminó tercero con apenas 11,85% en la categoría Senador, muy lejos de los dos primeros.

El funcionario se hizo cargo de la derrota y manifestó que el desgaste de la función pública era una de las causas de los magros resultados. Pero peor resultado obtuvo el vicegobernador y presidente del Senado, Antonio Marocco, que encabezando la misma lista, pero para convencional constituyente, obtuvo aún menos votos que Posadas, y quedó cuarto por detrás del Frente de Todos, que llevaba a Sonia Escudero como principal exponente.

Aunque pasó más desapercibido, el ministro de Gobierno, Ricardo Villada, que integraba el espacio ganador Unidos por Salta, no obtuvo los resultados esperados con su partido Primero Salta, quedándose con un tercer puesto en el Concejo Deliberante de la capital y quien lideraba esa lista era una no partidaria, la referenta de Libres del Sur, Malvina Gareca.

Ni bien se supieron los resultados, desde el Grand Bourg se rumoreaba que se venían tiempos de cambio en el gabinete, incluso antes de lo estipulado, como para renovar algunos aires. Y mientras desde el sector de Villada negaron los rumores alegando que no consideraban haber hecho una mala elección, el mismo Matías Posadas pidió tiempo para hablar con el gobernador.

Históricos afuera

Uno de los que prácticamente se despidió de su vida política fue el ex intendente y vicegobernador Miguel Isa, que intentó retornar desde el justicialismo y por donde comenzó, el Concejo Deliberante salteño. Sin embargo, sorprendió el escaso acompañamiento que obtuvo, y solo recolectó un magro 4% que no le alcanzó ni siquiera para hacer piso.

Como Isa, Javier David también buscaba su retorno a la vida política pero como candidato a diputado utilizando el sello del PJ. Y quedó muy relegado en la fila, ubicándose en un séptimo lugar, por detrás de David Leiva, que logró arañar una banca con Memoria y Movilización.

Estos dos exponentes, también revelan el declive del partido que gobernó durante años la provincia y que hoy, como en 2019, no logró imponer a ningún legislador propio.

Otro histórico que se retirará en diciembre será el diputado por Anta, Pedro Sández. Esta vez no logró retener su banca de diputado a través del Frente Salteño. El legislador llevaba seis períodos consecutivos, pero el electorado le dio la espalda y lo mandó al quinto lugar con apenas poco más de 1800 votos.

La que se despide del Senado es Silvina Abilés, que buscaba su tercera reelección y quizá marca un final de época en su tándem con el intendente de Vaqueros, Daniel Moreno, que también perdió en la categoría Convencional Constituyente contra la candidata del Frente de Todos, Viviana Canchi. 

También dejará el Senado el representante por Guachipas y ultra saencista, José Ibarra. El legislador no pudo renovar su mandato y cayó ante Diego Cari, de Salta para Todos, que le sacó más de 20 puntos de diferencia. Pero a la vez fue superado por el candidato de Salta Independiente, Federico Parra. Ese partido logró el 32,35% contra los casi 23 de Gana Salta, que llevaba a Ibarra como su máximo exponente departamental.

En General Güemes el PJ también perdió terreno, su candidato a senador, el ex intendente de Campo Santo y ex secretario del Interior de la provincia, Mario Cuenca, quedó tercero y logró apenas un magro 16,9% (4137 votos), lejos de quien consiguió renovar su banca, Carlos “Kety” Rosso, que alcanzó el 30,55%.

Por último, demostrando también la caída en su imagen de los exponentes del Partido de la Victoria, en Rivadavia, Ramón “Rana” Villa perdió su posibilidad de ocupar un lugar entre los diputados cuatro años más en manos del candidato de Gana Salta, Moisés Balderrama, y del referente de pueblos originarios, Rogelio Segundo, que fue con la lista del Frente Grande.