Finalmente, pese a las resistencias dentro de Juntos por el Cambio, el ex presidente Mauricio Macri comenzará a participar activamente de la campaña para las elecciones primarias. Arrancará este viernes, en la Ciudad de Buenos Aires, donde se mostrará con la precandidata a diputada María Eugenia Vidal. También tiene previsto aparecer en distritos clave como Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe. "No tengo dudas de que Mauricio suma", dijo el jefe del gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, aunque que por lo bajo desde su entorno repiten todo lo contrario: la imagen del expresidente es un lastre, sobre todo en el conurbano bonaerense.
La aparición de Macri con Vidal está prevista para este viernes a las 10.30 en el Museo Sívori y tendrá como eje el tema educativo, por lo que también estará la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña. Para la semana que viene, se espera su presencia en Provincia de Buenos Aires junto al precandidato Diego Santilli, quien competirá en las PASO con la lista radical de Facundo Manes. Luego, en fecha a confirmar, visitará la provincia de Córdoba, para exhibirse con los precandidatos para el Senado, Mario Negri, y para Diputados, Gustavo Santos.
Larreta compartió ayer una presentación con Vidal. "Por supuesto tiene que participar", dijo sobre el rol de Macri durante la campaña y sostuvo que, si hasta ahora no lo hizo, fue porque "estaba afuera, volvió y tuvo que respetar la cuarentena".
Tensiones internas
Desde que Macri regresó a la Argentina, tras una larga estancia en Europa, se plantearon tensiones al interior de Juntos por el Cambio sobre cómo iba a ser la participación del expresidente en la campaña. Si Larreta y Vidal disimularon sus dudas públicamente, aunque sus entornos las explicitaron, el titular de la UCR, Alfredo Cornejo, en cambio, fue más frontal: advirtió que la aparición de Macri iba a ser funcional al oficialismo y que no sería conveniente su presencia en la campaña.
Lejos de la centralidad que Macri pretende, sus socios en Juntos por el Cambio vienen haciendo lo imposible por avanzar con la campaña como si la gestión del período 2015-2019 no hubiera existido. El expresidente, en tanto, insiste en reclamar que los referentes de JxC defiendan su gestión y él mismo no pierde oportunidad para intentarlo, como hizo con la publicación del libro Primer tiempo, donde se esforzó por convencer de que los cuatro años que terminaron en una profunda crisis socioeconómica fueron --en verdad-- un buen gobierno. "Ya a esta altura, les habla a los convencidos. A nadie más", reflexionaban en la campaña de Juntos por el Cambio, en la que más de uno hubiera preferido que Macri se quedara en Europa hasta noviembre.
Cambia, todo cambia
De todos modos, el ala dura alineada con Macri logró que los demás sectores acepten su participación en la campaña, quizá como un mal menor frente a otra posible disputa interna, también como estrategia para contener a los votantes que le piden a la alianza del PRO, la UCR y la CC una oposición más cerrada frente al gobierno nacional. De hecho, tanto Larreta como Vidal vienen ensayando un discurso más crítico contra el Frente de Todos para evitar la fuga de apoyos hacia listas como la de Ricardo López Murphy o la del libertario Javier Milei.
"Es importante para Juntos por el Cambio. En la Ciudad de Buenos Aires muchas de las transformaciones que la gente valora las empezó él", concedió Rodríguez Larreta a su antecesor en el gobierno porteño. A la vez, buscó bajarles el tono a las fuertes disputas dentro de la coalición: "Obviamente hubo algunos comentarios no felices, pero hace un par de semanas que no se escuchan", dijo. "Hoy nuestro foco es entregar propuestas a la gente. Esa es nuestra campaña, no nos enganchamos en discusiones políticas internas", dijo el mandatario de CABA, que, de paso, aprovechó para decir que "el mejor candidato" en territorio bonaerense "es Diego Santilli porque tiene experiencia".
Por su parte, María Eugenia Vidal adelantó que el martes próximo el espacio realizará la "presentación de todos los proyectos" que llevarán al Congreso en caso de ser electos "con eje en educación, trabajo y mejora en el sistema político". "Hay que hacer cosas para recuperar la confianza", planteó Vidal, quien abandonó la Provincia de Buenos Aires, tras ser gobernadora, para buscar primero una banca desde CABA y, luego, la Jefatura de Gobierno.