Siete imputados en un banquillo virtual, sus defensas, cuatro fiscales, tres jueces y alrededor de un centenar de testigos serán parte del juicio que comienza hoy por la saga de balaceras de 2018 contra edificios judiciales y viviendas vinculadas a operadores de justicia. El clima de la jornada estará marcado por un operativo de control con casi 300 policías y 60 patrulleros, además de cortes de calle en la manzana de Mitre, Virasoro, Sarmiento y Rueda. En la antesala, el Centro de Justicia Penal, escenario del debate que se extenderá por cuatro semanas, fue baleado anteanoche (ver aparte) por desconocidos que circulaban en una moto por calle Sarmiento. Justamente, uno de los diez hechos que serán ventilados desde hoy ocurrió en ese mismo edificio, en agosto de 2018, por el que Ariel "Guille" Cantero -señalado líder de la banda de Los Monos- está imputado como instigador. La acusación --que incluye a otras seis personas-- indica que cometió los hechos desde la cárcel, donde ya estaba preso y recientemente condenado en la megacausa de asociación ilícita y homicidios que se juzgó aquel año.
"Intimidar y amedrentar; infundir temor y condicionar la libre y normal determinación para decidir" de jueces y operadores de justicia, es el móvil que plantea la acusación con la que hoy llegan a juicio Cantero y otros seis imputados con pedidos de pena que van de 24 a 9 años y medio de prisión. Esos mismos términos resurgieron ayer ante el nuevo ataque al Centro de Justicia Penal, según la lectura que hicieron diferentes funcionarios de las áreas implicadas.
Un clima similar al de ayer se vivió durante las jornadas de 2018, por la seguidilla de ataques que generaron fuerte impacto institucional. Tras la investigación penal, los fiscales Miguel Moreno, Matías Edery, Aníbal Vescovo y Gastón Ávila llevarán hoy esos hechos a juicio para que sean analizados por el tribunal compuesto por Hebe Marcogliese, Rafael Coria y Pablo Pinto. Para ello, se esperan entre 85 y 110 testigos, según estimó una fuente cercana al caso, ya que dependerá de lo que transcurra en el debate.
Durante la audiencia, que está prevista desde las 8 de esta mañana, se montará un operativo que ayer fue adelantado por el secretario de Seguridad Pública, Germán Montenegro, con puntos fijos y otros móviles, que incluyen casi 300 efectivos policiales y 60 vehículos de la fuerza. Ayer ya había restricciones de ingreso a la zona. Es que según se indicó desde la cartera de seguridad, el despliegue ya estaba organizado --incluso la presencia virtual y no física de los imputados-- para que se pusiera en marcha un día antes del juicio (es decir, ayer) y hasta la finalización del mismo. "Hemos reforzado hace unos días objetivos tanto físicos como personales. Y desde el viernes va a haber un despliegue más robusto del que habitualmente hay, con cortes de calles, personal policial y custodia de testigos y funcionarios judiciales", dijo Montenegro en LT8.
Los imputados y los hechos
Los ataques que llegan a juicio hoy fueron cometidos entre mayo y agosto de 2018, tras las condenas por el primer juicio a la banda de Los Monos, ese año. "Guille" Cantero, actualmente detenido en el penal de Marcos Paz -desde donde hoy estará conectado vía Zoom-, enfrenta un pedido de pena de 24 años de prisión como instigador. Para Lucía Uberti y Matías Nicolás César los fiscales pidieron la misma pena, como instigadores y partícipes, según cada hecho. En tanto, para Daniel "Teletubi" Delgado piden 13 años de prisión, que podrían ser unificados con la pena que cumple por el triple crimen de Villa Moreno. La misma condena fue solicitada para Leonardo "Chulo" Olivera; mientras que en el caso de Leonel Fernández, se piden 12 años; y para Oscar Enrique Chávez, 9 años y medio, por diferentes roles dentro de la organización.
El primero de la seguidilla de hechos se registró la noche del 29 de mayo de 2018 cuando fueron baleadas dos viviendas de Italia al 2100 y Montevideo al 1000, donde había vivido el juez Ismael Manfrín, uno de los que intervino en el juicio a Los Monos, ese mismo año. Al mes siguiente, fueron blanco otras dos casas de Zeballos al 2500 y Dorrego al 1600, vinculadas a la familia de la jueza Marisol Usandizaga, que también integró el tribunal. Y el 4 de agosto las balas llegaron a Libertad al 300, a un inmueble que había pertenecido a la familia de esa magistrada, a quien también se asoció el hecho de Buenos Aires al 1700. El mismo 4 de agosto fue el primer ataque al Centro de Justicia Penal. Al día siguiente, una casa de Tarragona al 700bis, que se relacionó a la camarista Carolina Hernández (aunque el tirador cometió un error con el bis); y días después, otro de San Luis al 1400, vinculado a Gabriela Sansó, ambas integrantes del tribunal de revisión del mismo juicio de 2018. Un día después, fue blanco de balas la sede del Ministerio Público de la Acusación, de Montevideo al 1900; y el 28 de agosto se registró otro hecho en la Policía de Investigaciones, de Lamadrid al 500.
Cantero, de 33 años, está detenido desde mediados de 2013 y ya cuenta con varias condenas tanto en la justicia provincial como federal: por la megacausa de asociación ilícita le dieron 22 años, que incluyó el homicidio de Diego Demarre; también lo penaron a 15 años como organizador de la banda narco conocida como Los Patrones; en otra causa recibió pena de 10 años como coautor de secuestro extorsivo agravado; mientras que en julio del año pasado fue penado a 6 años y 8 meses, por amenazas telefónicas a un juez de sentencia, desde el penal de Rawson.