El presidente Alberto Fernández viajó este lunes a San Juan, donde junto al gobernador Sergio Uñac recorrió la fábrica textil Vesuvio, de la firma internacional Lacoste, y los barrios Sierras de Marquesado e Ingeniero Céspedes, donde con financiamiento del Gobierno nacional se construyen 800 viviendas para familias afectadas por el sismo registrado en enero pasado en la provincia cuyana.
Esta semana, el Presidente visitará también Catamarca --el miércoles-- y La Pampa --el viernes--, como parte de su agenda federal.
Luego de la recorrida por la provincia cuyana, compartió un acto junto al gobernador de San Juan, Sergio Uñac. En ese marco, el presidente reafirmó su decisión de optar por preservar "la vida y la salud de la gente" en la pandemia de coronavirus, aun con "consecuencias que no podríamos evitar como que la economía se complique".
Agregó: "Un mal resultado económico podemos revertir, pero una muerte no podemos revertir".
En ese sentido, reivindicó las medidas económicas desplegadas por su Gobierno para atender el impacto de la pandemia de coronavirus y aseguró que se trabajó "para que la economía se resienta lo menos posible y poder llegar a todo el país".
"Logramos preservar gran cantidad de pymes", afirmó el Presidente y recordó que se dieron ayudas a través de la ATP y del IFE que "ayudó en toda la Argentina a 9 millones de personas".
Además puntualizó que "nada de este tiempo fue fácil pero en este tiempo pudimos llegar a los más necesitados; pudimos entregar 20 mil viviendas pensando en los derechos que tienen los argentinos".
Fernández agradeció el "acompañamiento de la mayoría" de quienes gobernaban las provincias en la gestión de la emergencia causada por el coronavirus, pero advirtió que parte de la oposición montó "un enorme show diciendo que ofrecíamos vacunas riesgosas".
El presidente se refirió al inicio de la pandemia: "En aquellos primeros días hubo quienes me decían 'olvidate de la salud de la gente porque finalmente se van a morir los que se tengan que morir. Lo más importante es que la economía no pare'. Pero la verdad es que no era lo mismo dejar que se mueran los que se tuvieran que morir. Y entonces en la disyuntiva optamos por preservar la salud y la vida, con consecuencias que no podíamos evitar, que significaba que la economía de algún modo se complique".
Agregó: "el Ministerio de Salud había desaparecido, había vuelto el sarampión, las vacunas se vencían en los galpones de la Aduana, y que por esas condiciones Argentina tenía que especular que sus muertos iban a ser alrededor de 250.000" según una encuesta recibida desde Inglaterra por las condiciones sanitarias heredadas del gobierno de Mauricio Macri.
En cuantro a la pandemia, expresó su confianza en que "por lo menos en un mes más" estará "la mitad de la población argentina vacunada con las dos dosis" de la vacuna contra el coronavirus y celebró que casi 700 mil sanjuaninos" ya hayan sido inmunizados.
"Cuando la inmunidad se haya alcanzado entonces sí el horizonte nos va a mostrar esa puerta de salida y ahí tenemos que repasar todo lo que nos pasó y cómo debimos enfrentar esto con el país que nos dejaron los que gobernaron los últimos 4 años", reflexionó el Presidente.
"Cuando yo veo cómo la pandemia nos complicó la vida y veo las cuentas públicas de los estados provinciales y me doy cuenta que está todo tranquilo y ordenado y nadie tiene el sobresalto de no poder pagar los sueldos, digo vamos por buen camino". En ese sentido agregó: "los numeros de la economia son muy auspiciosos".
En terminos económicos, Alberto Fernández reafirmó que no negociará con el FMI "en ninguna cena", sino "discutiendo, preservando el derecho de los argentinos" y aseguró: "Antes de pagarle al Fondo debo pagar un montón de deuda social en la Argentina".
Asimismo, advirtió sobre la dimensión de la deuda adquirida por el Gobierno de Mauricio Macri y, sin nombrarlo, afirmó: "Para el mundo entero, para arreglar el problema de la pandemia, el FMI dispuso 50 mil millones de dólares y alguien en Argentina tomó un crédito por 57 mil millones de dólares y todavía habla".
Agregó: "No van a encontrar una cuenta mía en Caimán, en Bahamas, en Nueva York, no van a ver a ningún hermano mío haciendo negocios con parques eólicos ni con autopistas, no van a ver que mis amigos se beneficien con la obra pública. No lo van a encontrar, porque no lo hacemos".
Y subrayó: "Que nada nos haga olvidar lo que vivimos hasta el 10 de diciembre de 2019, porque tuve que arreglar una deuda de 6.000 millones de pesos que tomaron con acreedores privados que dejaron impagas. Y ahora estoy discutiendo con el Fondo, un acuerdo que al país le costó 44.000 millones de dólares pero que orginalmente eran de 57.000 millones"
Para tomar dimensión de la deuda contraida por MAcri con el organismo crediticio, Fernández señaló: "El Fondo ha dispuesto a darle a todo el mundo 50.000 millones de dólares (por la pandemia) y alguien en Argentina tomó un crédito de 57.000 millones de dólares. Y todavía hablan, es muy impresionante".
El presidente Alberto Fernández pidió al final del acto no "repetir errores" y estar "más unidos que nunca", ante "el mayor riesgo de que la puerta de salida sea el túnel del tiempo que nos acerca a un pasado que nos hizo mucho daño".