Tras cinco semanas de paro docente en Salta, los Docentes Autoconvocados de la Plaza definieron, por 526 votos de un total de 596, levantar las medidas de fuerza en la provincia. En otra instancia, y por más de 300 votos, advirtieron que mantendrán esta decisión hasta el 17 de septiembre, fecha fijada por el gobierno de Gustavo Sáenz, para iniciar las mesas técnicas paritarias.
La determinación fue en línea con lo resuelto por el Sindicato de Trabajadores de la Educación de Salta (Sitepsa), que el miércoles por la noche también votó levantar las medidas de fuerza, no sin antes calificar de insuficiente la propuesta salarial que obtuvieron el martes por la madrugada.
El principal reclamo que sostenía la docencia desde el 1 de agosto era el incremento salarial y el rechazo hacia los gremios docentes que se reúnen con el Ejecutivo provincial en la Mesa Intergremial, dado que no se sienten representados. Tal fue la fuerza del reclamo, que al gobierno salteño no le quedó otra que recibir este último martes al sector mediante una audiencia de conciliación obligatoria que se dictó para el Ministerio de Educación de Salta y Sitepsa.
La delegada de los Autoconvocados por Capital, Silvia Di Piazza, dialogó con Salta/12 y afirmó que en las cinco semanas de lucha la conquista más grande fue que "a pesar del tiempo transcurrido, el gobierno se tuvo que ver en la obligación de sentarse a dialogar" con ellos.
Acto seguido aseguró que lograron conquistar el 15% de aumento hasta diciembre bajo la presión que se ejerció desde el inicio de la manifestación. El jueves 26 la Mesa Intergremial negoció ese porcentaje, por lo que la provincia alcanzará un incremento del 51% para este año, ya que hasta julio había acordado un 36%. Con lo acordado, se supera la paritaria nacional, que cerró en un 45,5%.
No obstante, en la única reunión que mantuvieron con los ministros de Educación, Matías Cánepa, y de Gobierno, Roberto Villada, lograron conquistar un 5% más al ítem 449, que está vinculado a la antigüedad e impacta únicamente en la docencia. Di Piazza también indicó que lograron subir $10 mil más al salario inicial docente, que pasaría a ser de $48 mil en septiembre, de $49 mil en octubre y de $50 mil en noviembre.
"Hemos podido conquistar más puntos y demostrarle a la sociedad y a la misma Intergremial que cuando se quiere, se pueden conseguir más puntos para nuestros salarios", manifestó la docente. Recordó que lo mismo hicieron en 2019, bajo el mandato de Juan Manuel Urtubey, y lo mismo consiguieron con Sáenz.
Aún así, reconoció que la respuesta obtenida es insuficiente ya que pedían una suba del 25%, y no del 15% como quedó. Pero aseguró que esperan seguir con las negociaciones con el gobierno a través de las mesas técnicas paritarias, a las cuales el Ejecutivo se comprometió a invitar a partir del 17 de septiembre. Advirtió que si esa conversación no se inicia en esa fecha, el sector autoconvocado retomará las medidas de fuerza.
Di Piazza precisó que allí no sólo se debatirá la cuestión salarial, sino que también se trabajará sobre el plan juridisccional de clases presenciales, el servicio de la copa de leche en todos los niveles educativos y la apertura de comedores para ciertas escuelas.
Por otro lado, la docente denunció la violencia institucional y psicológica que sufrieron por parte del Ejecutivo provincial, además del abuso policial que se hizo más evidente en la represión que se vivió el lunes 23 en las puertas de la Casa de Gobierno de Salta, donde la docencia trasladó la manifestación.
"Existió todo tipo de destrato social", expresó, recordando que también se llegó a la difusión de información privada de las delegadas, como sus recibos de sueldo y el de sus parejas.
Por la tarde, la docencia ya había despejado la entrada de la Casa de Gobierno de Salta, que estaba con más de 40 carpas.
Otro de los puntos aprobados fue el pedido de derogación de la resolución ministerial 428/21, que establece que si los docentes no regresaban a clases hasta hoy, se iniciaba el descuento de los días de paro. Y también dispone que quienes volvían, debían trabajar en un plan de recuperación de horas. Para la docencia, esa resolución va en contra del derecho a huelga establecido en la Constitución Nacional.
Por otro lado, el otro sector que se reúne bajo la Asamblea Provincial Docente Autoconvocada, que está más alineado al Partido Obrero, definió también suspender el paro de actividades. Así se resolvió en el encuentro bimodal que se transmitió desde las 19 en la plaza 9 de Julio de la capital salteña.
La decisión del sector que se reunió desde el mediodía, afectó a la decisión de la tarde. Ángel Tolaba indicó a Salta/12 que el saldo de este mes de manifestación fue "positivo", porque se evidenció la falta de gestión de parte de los funcionarios provinciales y el acompañamiento al reclamo de parte de la población en general.
Días antes ya habían adelantado su disconformidad con el resto de las delegadas que "festejaron" lo ofrecido por el gobierno salteño.
Sólo había que hablar
Lo que no deja de sorprender es que las asambleas de los últimos dos días y el levantamiento de las medidas se dieron luego de que el Ejecutivo provincial finalmente decidiera recibir a los Autoconvocados y acordar una propuesta salarial. En este sentido, Di Piazza aseguró que quedó demostrado una vez más la "actitud caprichosa" del gobierno al no querer destrabar el conflicto.
"Era muy simple la cuestión porque sólo tenían que sentarse a escuchar", señaló. Además, dijo que durante todo 2020 realizaron presentaciones formales para que se abriera el diálogo, incluso llegaron a elaborar una encuesta a toda la docencia salteña, que exhibió algunas de las demandas generadas a raíz de la pandemia.
La docente reiteró que desde que empezó la gestión de Gustavo Sáenz venían realizando un trabajo "impecable", intentando visibilizar su trabajo en pandemia, y las carencias que fueron encontrando. "Todo eso estaba expresado en la realidad geográfica de cada departamento", pero "ellos nunca lo leyeron y sólo archivaron nuestras notas", cuestionó.
Añadió que no hubo nunca ánimo de trabajar en unidad, ni desde el ministro Cánepa ni de los funcionarios de segunda línea como la secretaria de Gestión Educativa, Roxana Celeste Dib. "Podrían haberse sentado a dialogar, pero no lo hicieron y este fue el resultado", precisó.
Es por eso, que consideró como positiva la instancia de mediación que abrió el Ministerio de Público Fiscal el miércoles por la mañana. Indicó que como sector, entienden que un conflicto de estas magnitudes "siempre debe tener una mediación y los docentes somos grandes mediadores". Ahora resta que el Ministerio Público cite al Ejecutivo provincial.
"Siempre instamos a un diálogo, pero que sea real, y no como el diálogo que mostró hoy (por ayer) el gobernador", recriminó la maestra. En su paso por Tartagal, Sáenz estaba dando una entrevista a un medio de comunicación y afirmaba que "el camino siempre es el diálogo".
Sin embargo, segundos después se lo ve subiendo rápidamente a su camioneta junto al intendente tartagalense Mario Mimessi, al ver que se acercaban tres maestras con la intención de reclamar la situación que estaban viviendo.
Aún así, el gobernador se expresó luego sobre la situación docente y aseguró que en su gestión han trabajado con los docentes que hacen paro. "Entendemos que la lucha es legítima, entendemos que hay muchas deudas históricas y una de las deuda histórica son los salarios de los docentes, de los enfermeros, de la policía y de toda la administración pública", manifestó.
Recordó que este es un año difícil y "que a todos nos costó mucho". Sostuvo que mucha gente se quedó sin trabajo y, en medio de una pandemia, consideró que "los docentes van a estar a la altura de las circunstancias y van a acompañar este esfuerzo grandísimo que está haciendo el gobierno por mejorar los salarios". También indicó que la provincia tiene un presupuesto "muy acotado y el 80% se va en sueldos".