El nuevo gobierno del régimen insurgente no tendrá mujeres y estará compuesto en su totalidad por talibanes. El mullah Hassan Akhund será el presidente y el mula Abdul Ghani Baradar, quien en los últimos tres años encabezó las negociaciones en Doha, será su mano derecha y jefe del gabinete de ministros. Entre los nombres revelados este martes por el principal portavoz de los combatientes, está uno de los hombres más buscados por el FBI

Nuevo gabinete

El principal portavoz del régimen talibán, Zabihullah Mujahid, anunció la composición del nuevo gabinete afgano. Al frente del Emirato Islámico de Afganistán, nombre con el que los insurgentes bautizaron al país centroasiático tras la toma de Kabul el mes pasado, estará Mohammed Hassan Akhund, nacido en la provincia afgana de Kandahar. El nuevo primer ministro fue un colaborador cercano y consejero político del fundador del movimiento talibán, el mullah Omar.

A pesar de pertenecer a la cúpula dirigente del movimiento talibán hace 20 años y haber integrado el gabinete de los insurgentes en su primer gobierno, Akhund no es tan conocido como el resto de los ministros designados. Aunque para el Consejo de Seguridad de la ONU, el nuevo presidente está en la lista de sancionados por “actos y actividades talibanes” y es considerado uno de los “comandantes talibanes más eficaces”.

Fundadores

El número dos del nuevo gobierno de los talibanes será Abdul Ghani Baradar, de 53 años, una de las figuras más conocidas por su rol en las negociaciones con Estados Unidos, que presionó para que el líder talibán fuera liberado en 2018. En 2001, tras la invasión estadounidense y de los países de la OTAN y la caída del primer régimen talibán, Baradar integró un grupo de insurgentes que estaba dispuesto a reconocer el nuevo gobierno en Kabul. Estados Unidos rechazó la iniciativa y la intervención en Afganistán se extendió por veinte años hasta el pasado 30 de agosto. Otro de los líderes que participó del diálogo en Qatar, Amir Khan Muttaqi, también integrará el nuevo gabinete. Muttaqi será el nuevo ministro de Relaciones Exteriores.

Herederos

En tanto una segunda generación de talibanes, hijos de reconocidos líderes islamistas radicales, también integrarán el gabinete que fue anunciado este martes. Uno de ellos, Sirajuddin Haqqani, de 48 años, hijo de Jalaludin Haqqani, fundador de la red Haqqani, estará a cargo de la cartera de Interior. La red Haqqani es una facción guerrillera de los talibanes, vinculada a Al Qaeda. Para Estados Unidos se trata de una organización terrorista, y asegura que es una de las facciones más peligrosas a las que se enfrentaron las tropas afganas y por ello, el nuevo ministro de Interior es uno de los hombres más buscados por el FBI.

Mientras que el mullah Yaqub, hijo de mullah Omar, a quien EEUU dio por muerto en 2013, estará al frente del ministerio de Defensa. Yaqub encabezaba la comisión militar de los talibanes que definía la estrategia de los insurgentes contra el gobierno afgano. El linaje del nuevo ministro de Defensa, cuyo padre es reverenciado como jefe de los talibanes, lo convierte en una figura unificadora entre los combatientes.

Tras el anuncio de la conformación del gabinete, el portavoz talibán, Zabihullah Mujahid, nombrado viceministro de Información y Cultura, aclaró que "el gobierno no está completo". El nuevo gobierno en el que 30 de los 33 funcionarios son de origen pashtun, grupo étnico al que pertenecen la mayoría de los talibanes, no resultó ser inclusivo como prometieron los insurgentes hace tres semanas.

Protestas en Kabul

En el país centroasiático continúan las protestas, en la más reciente varias personas resultaron heridas cuando los talibanes abrieron fuego contra los manifestantes para dispersar a la multitud que salió a las calles para rechazar una reunión de seguridad entre Pakistán y los insurgentes."Primero los talibanes abrieron fuego al aire y luego comenzaron a disparar contra los manifestantes, varios resultaron heridos", dijo un manifestante.

Fawzia Wahdat, una de las organizadoras de las protestas en Kabul, aseguró que cientos de mujeres fueron detenidas temporalmente. "Las mujeres, que fueron detenidas por los talibanes, han sido liberadas y los talibanes nos han dicho que las llevaron a un lugar seguro y no habían sido arrestadas", dijo Wahdat, que también aseguró que "un gran número de nuestros hermanos y hermanas fueron golpeados" en las protestas. "A pesar de la violencia, los disparos y las palizas, hemos podido completar nuestras protestas y hemos enseñado al mundo que no somos el pueblo mudo de hace veinte años", destacó.

La señal afgana Tolo News denunció en un comunicado que uno de sus camarógrafos, Wahid Ahmadi, fue golpeado por los talibanes cuando cubría las protestas y luego fue detenido durante horas hasta que lo dejaron en libertad.