Los tarifazos a la energía en la era de Mauricio Macri, que derrumbaron los ingresos y la capacidad de ahorro de la población media y baja, dañaron la vida cotidiana de una parte mayoritaria de la población. Un informe del Observatorio de Servicios Públicos de la Universidad Nacional de La Plata (OSP-UNLP) dio cuenta de ese impacto y de cómo cambió la ecuación desde que, en diciembre del 2019, el Gobierno Nacional intervino declarando la emergencia tarifaria y frenando la escalada de aumentos planificada.
En el Monitor de Tarifas de la entidad se graficó que existe un descenso a la mitad de la porción de ingresos que los hogares destinaban al pago de facturas de luz y gas en 2021, respecto al 2019. Puesto en cifras, una familia que percibía en junio de 2019 un Salario Mínimo, Vital y Móvil debía destinar un 22,4 por ciento al pago de las facturas de ambos servicios. En el mismo mes, pero de 2021, un 12 por ciento. Y una familia a la que sólo le ingresaba una jubilación mínima en mayo de 2019 pasó de destinar un 26 por ciento a un 12,3 por ciento, en junio de 2021 para pagar ambos servicios.
“Las facturas de esos servicios públicos registraron un amesetamiento entre fines de 2019 y el primer trimestre de 2021 producto del congelamiento tarifario dispuesto por el Poder Ejecutivo Nacional en diciembre de 2019”. destaca el trabajo. Y agrega que “a ello hay que sumarle el rol de los programas de asistencia también desplegados a nivel federal tuvo un efecto nodal: posibilitó que en 2020 salieran de la indigencia y pobreza energéticas 2,8 millones de hogares, tal como lo evidencia el anterior informe el OSP-UNLP. En el caso del gas y contemplando la ampliación del Régimen de Zona Fría posibilita un alivio de un 30 por ciento en las facturas a partir de julio que alcanza el 50 por ciento para los hogares más vulnerables”.
En la era Macri, las tarifas de los servicios públicos tuvieron alzas superiores, en algunos casos, al 2000 o 3000 por ciento, que pegaron de lleno en los sectores más bajos y en los jubilados. En paralelo, dañaron el consumo porque les quitaron a las familias la capacidad de ahorro y otro consumo. Ese esquema resintió toda la estructura económica y tuvo además un correlato en las industrias, que también padecieron la situación de facturas impagables en un escenario donde la actividad económica tampoco les retribuía en números de ventas y producción.
Todo para las empresas
Otro de los problemas que generó el tarifazo de Macri es que se trató, básicamente, de una transferencia de recursos de los consumidores a las empresas de servicios públicos, no de una actualización de valores en línea con la inflación. Este punto también es resaltado en el informe del Observatorio de la Universidad de La Plata.
El trabajo habla de "una fenomenal asimetría entre la evolución de los ingresos de las familias y los ingresos de las empresas del sector energético". Para graficarlo, apuntan que "mientras los ingresos familiares entre diciembre de 2015 y diciembre de 2020 se multiplicaren en promedio por 5,14 veces, los ingresos brutos de las distribuidoras de luz y gas lo hicieron por 21 y 10,4 veces, respectivamente, tomando un promedio ponderado".
Aclara el organismo que "eso se tradujo a su vez en extraordinarias ganancias en dólares. Entre los ejercicios 2016 y 2019, inclusive y tomando la cotización del Banco Central promedio anual tipo vendedor mayorista de la divisa estadounidense", Edenor acumuló utilidades netas por 364,64 millones de dólares; Edesur por 294,96 millones de dólares; Metrogas por 537,51 millones; Naturgy Ban 208 millones; y Camuzzi Gas Pampeana 46,97 millones.
En el caso de las PyMEs el informe demuestra que, de forma similar a los hogares, padecieron una grave situación producto de los incrementos tarifarios ocurridos entre 2016 y 2019, cuyos efectos aún resultan ostensibles. En efecto, mientras los valores de las facturas de gas y de luz que este segmento productivo debió afrontar se multiplicaron por 44 y por 32 respectivamente en promedio, se produjo el cierre de 24.500 PyMEs y la pérdida de más de 126.000 puestos de trabajo en todo el país (AFIP-SIPA).