Científicos de la Universidad de Oxford trabajan en una vacuna para tratar el cáncer de pulmón que está basada en la tecnología utilizada para la vacuna que fabrican junto a la farmacéutica AstraZeneca. El fármaco -que hasta el momento solo ha sido probado en animales- tuvo resultados positivos.
Según un artículo publicado en el Journal for ImmunoTherapy of Cancer, el estudio demostró que la vacuna resultó eficaz y generó una “potente inducción de células T CD8”.
“Demostramos que la vacuna ChAdOx1/MVA P1A aumenta los niveles de linfocitos infiltrantes de tumores (TIL) CD8 + específicos de P1A en un tumor que de otro modo estaría mal infiltrado y mejora la respuesta al bloqueo, lo que resulta en un mejor control del tumor y una mejor supervivencia”, describe el artículo.
El estudio fue realizado por el grupo del profesor Benoit Van den Eynde en el Instituto Ludwig para la Investigación del Cáncer de la Universidad de Oxford en colaboración con los coautores Adrian Hill e Irina Redchenko del el Instituto Jenner de la Universidad.
Hasta el momento, el fármaco -basado en una vacuna Ankara modificada (MVA) y adenovirus de chimpancé (ChAdOx1)- solo ha sido probado en ratones, pero “en breve comenzará un ensayo clínico”.
Los investigadores aseguraron que el potencial de las vacunas contra el coronavirus es “revolucionario”. Además del fármaco contra el cáncer de pulmón, los científicos están trabajando en una vacuna contra el cáncer de próstata.
El cáncer de pulmón es la primera causa de muerte a nivel mundial. En Argentina representa el 15 por ciento de las muertes de cáncer en toda la población y solo es superado por en cáncer de mama.
La enfermedad es tratada con inmunoterapia, que consiste en un conjunto de fármacos que hacen que las células inmunitarias de tipo T CD8 ataquen al tumor. Sin embargo, esta terapia no siempre resulta eficaz.
Por esa razón, los científicos buscan potenciar el efecto de las células T para reducir el tumor. Y ese es el objetivo de la vacuna que desarrolla la Universidad de Oxford.