Tras el pedido de la vicepresidenta Cristina Fernández al presidente Alberto Fernández para revertir la decisión de la multinacional Dow Chemical de cerrar su planta de poliuretano en Puerto General San Martín, continuaron ayer las gestiones desde el Sindicato de Obreros y Empleados Petroquímicos Unidos (Soepu) para encontrar una salida. "Fue un gran apoyo, y hoy (por ayer) recibimos mensajes de varios funcionarios nacionales y provinciales para ponerse a disposición y conformar una mesa de trabajo y producción, creemos que la situación puede cambiar", dijo a Rosario/12 el titular del gremio, Mauricio Brizuela. "Si logran pararla no se va a volver a producir en muchísimo tiempo, es una empresa grande, que está instalada desde hace mucho, no podemos permitirlo", planteó el dirigente gremial.

Las palabras de la vicepresidenta Fernández de Kirchner en el acto de cierre de campaña del Frente de Todos en el predio de Tecnópolis el pasado jueves, diciéndole al presidente Fernández que no puede permitirse el cierre de la planta de Dow Chemical en el cordón industrial, fueron recibidas con entusiasmo por el gremio. Los petroquímicos bregan por la continuidad laboral de los 120 trabajadores directos que emplea la única fábrica que produce desde el poliuretano expandido que se compra en aerosol hasta almohadas y colchones, los revestimientos de la industria de línea blanca y los asientos y tableros de las automotrices. "De allí la importancia de cuidarla y mantenerla en funcionamiento", enfatizó Brizuela. 

Mientras esperan que se confirme una reunión la próxima semana en Buenos Aires con el ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías Kulfas, desde el gremio quieren avanzar en el armado de una mesa de trabajo con todos los actores con el objetivo de salvar la planta. "Con Dow o sin Dow, con la unidad productiva no desmantelada", remarcó el titular de Soepu. 

"Ellos plantean una reestructuración global, que tienen capacidad ociosa en Brasil y con eso iban a importar porque no quieren tener competencia; es más, habían acordado con una empresa de Zárate para hacer la logística desde la semana pasada. Por eso, desde el Ministerio de Trabajo explicaron que la conciliación obligatoria se respeta siempre y cuando las dos partes se abstengan de cualquier medida. La empresa quería parar una de las cuatro plantas integradas que hay, la más importante y que más volumen saca", agregó Brizuela. 

En el marco del conflicto laboral, el pasado miércoles hubo una nueva audiencia virtual en la cartera laboral provincial donde se definió extender la conciliación obligatoria por otros 15 días. También se acordó que volverán a reunirse con la Mesa de Trabajo conformada por representantes de la empresa, las diputadas Cecira Arcando y Silvana Di Stéfano, miembros de la CGT San Lorenzo y de Soepu. 

"La empresa tiene que traer un escrito para conocer en qué forma estaría vendiendo y cuántos equipos se quisieran llevar. También les pedimos los balances porque seguimos insistiendo y estamos seguros que es una empresa redituable", planteó Brizuela. El gremio también reclama que la fábrica sea declarada de utilidad pública. "Lo primero que van a a sacar en la Cámara de Diputados es un proyecto para declararla de interés público, como una herramienta de presión para que la empresa se siente a negociar en serio y no sigan dilatando”, apuntó.

En declaraciones a Si 98.9, el ministro de Trabajo provincial, Juan Manuel Pusineri, dijo ayer que la empresa "tiene una decisión global de retirarse del mercado en esta planta en Santa Fe. Pero les insistimos en la posibilidad que sea trasferida a otro titular que pueda explotarla, con los mismos trabajadores que actualmente se desempeñan”. El funcionario agregó que Dow "quiere irse con parte de la maquinaria, que es la fundamental para el know-how de la producción”. Además, aseguró que hay empresarios de diferentes firmas que se interesaron en la planta.