La fiscala Mónica Poma solicitó agregar la calificación de encubrimiento y falso testimonio contra Pablo Maximiliano Nieva (27) y Ruth Loayza (28). El hombre venía siendo juzgado como partícipe necesario del femicidio de la joven Gimena Bernasar, mientras que la mujer estaba acusada de haber participado de manera secundaria en este hecho. El principal acusado, como autor del crimen, es la pareja de la víctima, José Nieva (23).
El juez Pablo Farah dispuso que el jueves 16 de septiembre se escucharán las últimas declaraciones testimoniales y el viernes 17 se realizará la audiencia de alegatos. Bernasar fue asesinada el 22 de junio de 2019, y su cuerpo fue encontrado en una habitación de su domicilio, en el barrio Leopoldo Lugones.
El abogado defensor de Pablo Nieva y Loayza, Juan Erazo, dijo a Salta/12 que la fiscala bajó la calificación de los delitos que les atribuye a sus defendidos, dado que el encubrimiento y el falso testimonio tienen penas inferiores a las de partícipes de un hecho grave como un homicidio. "Esta defensa entiende que tampoco iría esa calificación (de encubrimiento y falso testimonio)", añadió Erazo.
En opinión del defensor, la acusación se basó en suposiciones. Dijo que no hay pruebas que impliquen a Pablo Nieva y a Loayza y por ello "no se puede sostener una calificación tan grave como la de partícipes" que en el caso del ser necesaria podría llevar a la misma pena que la del principal acusado, señaló.
Erazo afirmó que sus defendidos habían ido a auxiliar a José Nieva en el inquilinato donde alquilaba luego de que llamara a su primo Pablo avisándole que "se había suicidado su novia", y negó que Pablo Nieva haya llevado a José Nieva hasta el lugar del crimen, "eso nunca pasó", aseguró el letrado. Por otro lado, aseguró que no hay pruebas de que Loayza haya borrado mensajes del teléfono de José Nieva, como se le atribuye.
Otra que descree del suicidio
En la ronda de testimoniales escuchadas ayer la policía Carla Gallardo, que intervino en un primer momento luego de que se informara un "supuesto suicidio" en el monoambiente donde vivía la víctima con José Nieva, contó que el cuerpo estaba en el piso, al costado de la cama y que se fijó si había algún soporte que pudiera usar una persona para ahorcarse pero no encontró ninguno.
"No entendía cómo había sido la mecánica", se asombró antes de lanzar otra frase que parece desmentir la teoría del suicidio: "Lo que más me llamó la atención era la violencia que tenía la persona sobre su rostro". Y en el dorso de las manos tenía signos de defensa. "Desde el principio era dudoso el hecho", sostuvo.
La policía recordó que José Nieva había manifestado que quiso auxiliar a Bernasar, y que por eso se generó el desorden que había en la cama. "Al costado externo de la cama había una mancha de sangre, como si algo (hubiera) estado apoyado sobre esa parte de la cama", describió la testigo. Indicó que había goteos al costado de la cama próximo a los pies donde se encontraba el cuerpo y que todo esto "no cerraba con la hipótesis del hecho". Dijo que también le llamó la atención una zapatilla que presentaba aspecto sanguinolento.
Gallardo contó que la ventana de la habitación estaba semiabierta y que las entradas no habían sido forzadas. "Había un desorden que se notaba que era reciente. En la cocina había algo de suciedad de días", describió. Una amiga de la víctima relató esta semana que cuando esperaba a la víctima miró hacia adentro por la ventana y vio el lugar ordenado.
El informe de la autopsia determinó que la causa del deceso de Bernasar fue asfixia por sofocación. La víctima también presentaba lesiones en distintas partes del cuerpo y signos de defensa.