El futuro inmediato del PJ bonaerense comienza finalmente a cristalizarse. Ayer, por tercera vez en 15 días, las autoridades partidarias, un nutrido grupo de intendentes del Conurbano y el interior y los referentes de La Cámpora se reunieron para avanzar en el armado de una propuesta opositora amplia y competitiva en el distrito más grande del país, donde se disputará políticamente el resultado simbólico de los comicios legislativos de octubre. Como en las dos citas anteriores, el eje estuvo puesto en las estrategias para lograr una estructura lo más inclusiva posible y no se discutieron nombres para las candidaturas. A pesar de que “el objetivo número uno” de los armadores de ese espacio es “llegar con una lista de unidad a agosto”, hubo consenso en que “no se cierra la puerta a las PASO” si esa herramienta sirve para dirimir diferencias que no puedan resolverse primero en la mesa de negociación.
Además, en la reunión de anoche, que se llevó a cabo en un local del barrio porteño de San Telmo que funcionará como centro de operaciones durante la campaña, todos los concurrentes coincidieron de forma unánime en convocar a la manifestación que se realizará esta tarde en Plaza de Mayo para repudiar el fallo de la Corte Suprema de Justicia que otorgó el beneficio del 2x1 a los condenados por crímenes de lesa humanidad.
“Como sociedad no podemos permitir esta estafa moral que es el beneficio a genocidas. Hoy más que nunca debemos defender las banderas de Memoria, Verdad y Justicia”, dijo al respecto el presidente del partido, Fernando Espinoza. La columna concentrará esta tarde en la esquina de las avenidas Belgrano y 9 de Julio a partir de las cuatro y media.
La principal novedad respecto a los encuentros anteriores fue la mayor confluencia de intendentes. Al primer encuentro, hace dos semanas, habían asistido una docena; al segundo, el martes pasado, acudieron dieciséis; ayer fuero treinta y seis los jefes comunales peronistas, del Conurbano y del interior, se dieron cita para plegarse a la estrategia oficial de cara a las PASO. Entre los recién llegados se destacaba Fernando Gray (Esteban Echeverría), que se suma a Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) y Mariano Cascallares (Almirante Brown), otros intendentes del Grupo Esmeralda que dejaron de lado la candidatura de Florencio Randazzo para sumarse a este espacio. Se notó la ausencia de Máximo Kirchner, que estaba en el Congreso debatiendo el proyecto de ley que limita la aplicación del dos por uno. La voz cantante del sector más kirchnerista la llevó Eduardo “Wado” De Pedro.
Respecto al desafío del ex ministro del Interior, los intendentes, La Cámpora y la conducción formal del partido coincidieron en que lo importante es llegar a las elecciones generales con todo el peronismo junto y encabezando un frente opositor que incluya también a otras fuerzas, y dijeron que si para eso es necesario pasar por primarias en agosto así se hará. “No se le va a cerrar la puerta a nadie que quiera conformar una lista de unidad, pero tampoco se le va a cerrar la puerta a nadie que considere que las candidaturas deben dirimirse de otra forma”, fue la definición que surgió del encuentro, ratificando la línea que se esbozó en las últimas semanas. El diálogo entre ambos sectores es “permanente” y a través de “múltiples canales”, aseguran de ambos lados.
Este fue la tercera reunión del espacio que encabeza Espinoza y se referencia políticamente en CFK, que definirá, al regreso de su viaje por Europa, si será candidata. Los dos anteriores tuvieron lugar en el quincho del diputado Juan Cabandié, pero en esta ocasión se mudó para dar espacio a los nuevos invitados y además ofrecer como punto de encuentro un lugar más neutral, para acercar a algunos dirigentes que aún desconfían de La Cámpora. “La idea es que sean citas cada vez más grandes y cada vez más representativas de lo que es el peronismo en la provincia de Buenos Aires”, confió uno de los organizadores, que planea que “cada vez que haya una se sumen tres o cinco dirigentes o diez dirigentes más” para llegar al cierre de listas, en 40 días, “con la unidad cerrada, ya sea en agosto o en octubre”.
Además de cerrar filas en el orden institucional y territorial, ayer se planificaron los próximos pasos, a cuarenta días del cierre de listas. La semana que viene habrá una nueva reunión, a la que estarán invitados representantes de los movimientos sociales, y para más adelante también se apunta a mantener encuentros con el movimiento obrero organizado y con otros partidos políticos que no son parte del peronismo pero quieren sumarse a esta alianza. El siguiente paso será empezar a discutir las candidaturas, pero eso no sucederá hasta que Cristina Fernández de Kirchner regrese de Europa y defina si su nombre estará o no encabezando en agosto la boleta azul y blanca.