El resultado de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) permite empezar a vislumbrar cómo podrían quedar conformados el Senado y Diputados a partir de diciembre. La palabra final la tendrán los electores en las generales del próximo 14 de noviembre así quedaría el Congreso si los espacios políticos mantuvieran entonces los mismos votos de este 12 de septiembre.
En Diputados se renuevan 127 bancas y en el Senado, 24. Más de la mitad de los cargos para la Cámara baja saldrán de cuatro distritos: Buenos Aires (35 diputados), Ciudad de Buenos Aires (13 diputados), Córdoba (9 diputados) y Santa Fe (9 diputados).
Del total de bancas en juego este año, 60 están en poder de Juntos por el Cambio y 51 ocupadas por representantes del Frente de Todos. En ese sentido, si se mantienen los resultados de las PASO, el bloque de Juntos por el Cambio alcanzaría la primera minoría de la Cámara Baja, con 188 bancas. El Frente de Todos se debilitaría ya que perderería nueve bancas en relación a la composición actual: quedaría con 111 lugares.
Por su parte, tanto para el bloque de José Luis Espert, Avanza Libertad, como para el Frente de Izquierda, las PASO dan una proyección de nuevas bancas: el primero de ellos conseguiría cuatro lugares, mientras que la izquierda, que tenía en juego dos bancas, alcanzaría a renovarlas, además de agregar dos nuevos escaños.
La proporción se invierte en el Senado. En esa Cámara el Frente de Todos tiene que renovar 15 bancas contra 9 que arriesga Juntos por el Cambio.
Con los resultados de las PASO, la composición sería la siguiente: el Frente de Todos sufriría la pérdida de seis escaños, mientras que Juntos por el Cambio renovaría las 9 bancas en juego, y sumaría 5 nuevos lugares.