De cara a la temporada invernal que comenzará dentro de las próximas semanas en toda Europa, el gobierno británico anunciará una serie de medidas para evitar una nueva ola de Covid-19, que hará hincapié en la vacunación y por el momento no incluirían cuarentenas estrictas, como las que rigieron en 2020 y principios de este año.

Los detalles del modo en que Gran Bretaña afrontará los próximos meses de riesgo serán dados a conocer mañana por el primer ministro Boris Johnson, que si bien se opone a las cuarentenas no las descarta para el caso en que continúen los contagios.

Entre los anuncios se espera que el premier derogue parte de los poderes que le otorgó la denominada Ley de Coronavirus, entre ellos las facultades para cerrar sectores de la economía, como locales comerciales, o aplicar restricciones a eventos y reuniones.

Los poderes que conservará serán aquellos fundamentales para proteger a la población, como el pago por enfermedad a los que se aíslan desde el primer día en lugar del séptimo. También, ordenar a las escuelas que permanezcan abiertas si cierran en contra de la guía del gobierno y ayudar a los hospitales públicos a obtener los recursos de emergencia.

Qué medidas seguirán vigentes

Según trascendió, se mantendrán los requisitos legales para que alguien se aísle si da positivo de coronavirus, a fin de proteger a los más vulnerables de la infección y controlar la propagación de variantes.

También se tendrá en cuenta la posibilidad de reintroducir el uso de barbijos y el trabajo en los domicilios si las circunstancias lo requieren.

Se informó también que las restricciones de viaje también serán revisadas y simplificadas. En este marco, el gobierno abandonó ayer su proyecto de imponer un pasaporte sanitario para poder acceder a discotecas y otros lugares muy frecuentados.

Las vacunas seguirán siendo la primera línea de defensa durante los meses de otoño e invierno respaldadas por nuevos tratamientos, test y un sistema de vigilancia de variantes líder en el mundo, dijo Johnson.

"Estoy decidido a deshacerme de cualquier poder que ya no necesitemos debido a nuestras defensas de vacunas", aseguró el primer ministro.

La clave es vacunarse


Al 9 de septiembre, casi el 90 por ciento de la población del Reino Unido mayor de 16 años ya había recibido una primera dosis de la vacuna contra el coronavirus y más del 80 por ciento está completamente vacunado. En tanto, ayer otras 56 personas murieron por coronavirus, lo que eleva el total de Reino Unido a 134.200 fallecidos.

Sin embargo, el Gobierno británico espera que los meses de invierno traerán nuevos desafíos y el coronavirus circulará junto con la gripe y otros virus respiratorios, mientras permanece la amenaza de una nueva variante.

Johnson informó que se pidió al Comité Conjunto de Vacunas e Inmunización (JCVI), que considerara un programa de refuerzo de la vacuna contra el Covid para toda la población.

Por el momento las vacunas de refuerzo se están ofreciendo a los sectores de la población más vulnerables, en términos sanitarios. También se espera que el programa de refuerzo de la vacuna comience este mes y se tome una decisión sobre la vacunación para los niños de 12 a 15 años.

"Es un pequeño paso para protegernos a nosotros mismos y proteger a otras personas", destacó el premier.