Un día después de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), salta/12 conversó con tres politólogos sobre lo que arrojaron los resultados, quién ganó, quién perdió y la manera en que se reconfigura el mapa político de cara a las elecciones generales del 14 de noviembre que definirán los tres representantes por Salta en el Congreso Nacional.
Los tres comenzaron reconociendo el contundente triunfo del principal precandidato del Frente de Todos, Emiliano Estrada, que se llevó el primer puesto doblando en votos a su inmediato perseguidor. También coincidieron en que ven difícil que algo catastrófico pueda suceder de cara a noviembre, sino que más bien, la corta brecha que separa al FdT con la de Juntos por el Cambio se puede ampliar aún más. Y sostuvieron que el gran perdedor fue Guillermo Durand Cornejo, que puede seguir perdiendo terreno en manos de los Biella.
La victoria de Estrada, “toma más relevancia sobre todo en el contexto de lo que sucedió a nivel nacional”, sostuvo uno de los directores de la consultora Droit, Pedro Buttazzoni. “Lo termina rescatando Salta no solo porque gana el Frente, sino porque Emiliano es el más votado”. Aunque consideró que ahora tendrá el desafío de sostener los votos de Jorge Guaymas “y de crecer por encima de eso porque posiblemente Juntos por el Cambio también pueda crecer algo”. Y para eso, "también tendrá que salir a convencer al votante de Felicidad, que hizo una buena elección superando las PASO pero ya todos sabemos que no tiene ninguna posibilidad de llegar a algo”. Es allí donde el sector de Estrada “tendrá que apelar al voto útil para conseguir esos tres puntos”.
Para Buttazzoni, la victoria de Carlos Zapata en el frente opositor fue una sorpresa porque no era un candidato propio de ese espacio a nivel nacional y no era el que acompañaban ni el PRO, ni el radicalismo, “Liendo era la elegida a nivel nacional y eso pesaba, pero sobre todo en capital”. Pero el que tuvo su peso e inclinó la balanza a su favor en el interior, fue Alfredo Olmedo “y su posicionamiento del color amarillo y la gorrita”.
También aquí resaltó que Zapata tiene un desafío “aún mayor que el del frente de Todos”, porque deberá convencer “no tanto a los votantes de Liendo, pero sí los de Héctor Chibán y Nicolás Avellaneda, que son todos candidatos muy diferentes y que hasta manejan distintos valores”.
Destacó que el precandidato de Unidos por Salta, Guillermo Durand Cornejo, “hizo una mala elección para las expectativas que se tenía de él” en contraposición a el rol que ocupó el frente Si-PRS, con la cantidad de votos obtenidos por Felipe Biella. Quien es el que más tiene para ganar de cara a las generales “porque no es conocido en el interior de la provincia y ahora va a tener tiempo para crecer ahí”. E incluso podría superar al legislador provincial, “Cornejo es un candidato muy conocido ya para los salteños y no sé qué tanto más tiene para dar y porque alguien lo votaría que ya no lo haya hecho”.
Sí subrayó que lamentablemente se repitió la apatía y baja participación del electorado en las provinciales, “un escenario de descontento con la política ya que si se suman los votos en blanco y los nulos estamos en casi 10 puntos, más la gente que no fue a votar con una participación que no llegó al 60%, demuestran que hay desilusión”.
Por lo que aún hay un buen porcentaje de votantes en disputa, aunque no auguró grandes cambios para las elecciones venideras, sobre todo en cuanto a la división de las bancas, de las que supuso que será difícil que no se repartan una cada uno de los dos Frentes nacionales y la tercera se la disputen Biella y Durand Cornejo.
La disputa por la tercera banca
Para la politóloga salteña Luciana Módica, becaria de la Fundación Española Botín, intentar trasladar la política salteña y sus resultados a lo nacional “es un error, porque tenemos dinámicas partidarias y políticas particulares de la provincia, y no solamente una derrota o victoria del Frente de Todos representa mayor o menor apoyo al gobierno nacional por parte del electorado”.
Módica recordó que en las provinciales, ese frente obtuvo el cuarto lugar, sin embargo el domingo “arrasó al menos en la diferencia que obtuvo el candidato ganador”. También despegó ese resultado solamente al acuerdo al que arribaron con el saencismo, “si puede haber aportado de alguna manera su estructura territorial”, pero no fue determinante sino “acompañamiento”.
La especialista remarcó que el voto nulo, para expresar algún disgusto, deberá ser analizado de alguna manera ya que esta vez superaron a los blancos, (5% nulos y 4 blancos). También dijo que se deberá prestar mucha atención al potencial ascenso de Biella potenciando la caída de Guillermo Durand Cornejo. Pero que también podría recibir votos de algún sector más ligado al radicalismo de Juntos por el Cambio “que no acompaña a Zapata”. “Ahí estará la disputa más interesante, para saber quién disputa la tercera banca”, puntualizó.
Como Buttazzoni, puso el eje en el terreno que perdió el oficialismo dentro del frente opositor a nivel nacional, ya que ni el PRO, ni el radicalismo se impusieron y será el último en entrar en esa alianza, y con vida propia desde el olmedismo, quien dispute su representatividad en el Congreso.
Saliendo del ámbito provincial, la especialista subrayó que le preocupa el avance de ciertos sectores de derecha, “venimos de varios años de avances en materia de Derechos y poniendo al país como pionero en la región, y este crecimiento de esos espacios puede poner en peligro las conquistas e impedir nuevas políticas que vayan en ese camino de ampliación de Derechos”. “Ese es un retroceso para la democracia”, manifestó.
“Noto hoy un discurso más que de antipolítica, contra la política, de trabajar activamente en su destrucción por parte de algunos referentes que representan esos sectores de la derecha, eso me parece muy peligroso para la democracia”, lamentó, y le añadió que ese tipo de discursos “es amplificado por algunos medios de comunicación”.
Reconoció el predominio de los dos frentes más representativos a nivel nacional, pero aclaró que eso sucede solo en las elecciones nacionales, “por eso el armado de la competencia electoral en Salta se desdobló, porque probablemente si hubiesen ido juntas los resultados de las provinciales no hubiesen sido los mismos”.
Empieza una elección nueva
El director de la consultora en comunicación política We, Benjamín Gebhard, destacó el “amplio y claro triunfo de Estrada, sobre todo porque hizo una muy buena elección en todo el territorio, incluso en la capital”. Y destacó que en el 2017, cuando logró obtener una banca a través de Sergio Leavy, había obtenido alrededor de 20 puntos, mientras que hoy supera los 30 “con un candidato que arrancó con poco conocimiento y que eligió un perfil moderado, hablando de propuestas y que fue blanco de críticas no solo de los externos, sino también de sus rivales internos, y sin embargo fue esquivando todos esos ataques”.
Sobre su rival directo, Juntos por el Cambio, evaluó que Carlos Zapata fue el precandidato más inteligente en esa interna al entender que para disputar el electorado clásico de ese espacio tenía que capitalizar todo lo que representa el olmedismo, “con esa idea llevó adelante una campaña con discurso y estética propia, diferenciándose de las otras tres listas que seguían el manual del PRO”. Y también resaltó que era el candidato con más conocimiento en el interior, por su presencia en la legislatura pero sobre todas las cosas por el peso específico de Alfredo Olmedo.
“Ganó el visitante”, indicó Gehbrad, y en ese sentido dijo que es una incógnita saber qué harán los votantes puros del PRO y el radicalismo, “porque los dirigentes dijeron que acompañan, pero no necesariamente la gente acompaña a los dirigentes”.
En tercer lugar, puso en igualdad de condiciones y como una incógnita, lo que puede suceder entre Felipe Biella y Guillermo Durand Cornejo. Resaltó la alianza que realizó SI, con buena imagen en capital, y el PRS, con estructura en el interior para ayudarlo a crecer.
Pero sobre quien fue el convencional más votado, expresó que pese al apoyo del saencismo y el romerismo “se desinfló un poco”, frente a una opción provincial independiente nueva como la de Biella y la cantidad de candidatos que llevaba Juntos por el Cambio. A eso le sumó que Durand Cornejo “es un candidato muy conocido y se buscaba la novedad”, a la vez que entendió que el discurso y las frases que utilizó el senador provincial fueron “muy extremas, como la de salvar y recuperar la República”, y que eso lo alejó de la agenda más cotidiana de la gente.
De cara al 14 de noviembre, intuye que comienza una nueva elección por las distintas posibilidades y aristas que se abren, “uno intuye que los votantes de Guaymás se inclinarán por Estrada, pero hay que ver qué hace con su candidatura Tane Da Souza (Felicidad), y puede pasar que sus votantes ya se hayan sacado el gusto de acompañarlo pero ahora entiendan que necesitan hacer algo en términos de utilidad y competitividad y terminen también votando al FdT”. Y añadió que con ese discurso jugarán desde el sector de Estrada, “haciendo pesar que no se puede jugar, en este contexto, con el voto, que puede quedar en manos de la oposición”.
Por último, y más allá de toda especulación o sorpresa que pueda surgir, consideró que la elección “va a terminar siendo parecida, porque la sociedad no le dio mucha importancia a esta instancia y no se comprometió”. Por lo que no ve un clima en el que la gente vea “una utilidad importante en su voto como para que se revierta tanto el resultado”.
Con respecto a la grieta provincial, subrayó que “está claro que existe en términos de peronismo o no peronismo, y ahí se ve en cuanto a lo que es el Frente de Todos con el PJ adentro, y todos los demás candidatos que disputan quitarle el lugar”.